Gran Canaria tiene una especial querencia por la manzana, fruta de la que consume nada menos que diez millones de kilos al año, pero de la que apenas produce un 1 por ciento de esa demanda.

Implantada en el ADN del isleño, especialmente en su variedad reineta, la también conocida como manzana francesa capaz de disparar los salivares por su exquisita acidez, tiene en Valleseco la huerta madre de una variedad que desde que el Ayuntamiento apostó en 2007 por dedicar su producción local a la sidra, ha convertido al municipio en referente mundial por su calidad. No en balde el productor local Ángel Domínguez logra el premio a la mejor sidra en X Salón Internacional de les Sidres de Gala de 2020.

Valleseco, el Cabildo y Spar impulsan la nueva marca Manzana en Fresco Radio Valleseco

Desde entonces se han ido incrementando por miles los matos en el pueblo de medianías. Primero entre los años 2010 y 2011, periodo en el que se plantaron 11.000 ejemplares más, a los que se sumaron otros 20.500 en los últimos cinco años. Pero con todo, el caso es que en los lineales de supermercados y grandes superficies encontrar una reineta de la tierra es un arcano imposible. De momento.

Porque entre el Ayuntamiento de Valleseco, el Cabildo de Gran Canaria, la Coag, y la cadena de supermercados Spar se ha formado una alianza para revertir la situación, como anunciaba ayer en La Laguna de la localidad su alcalde Dámaso Arencibia, impulsando la marca Manzana en Fresco, proyecto en el que participan las cuatro entidades para facilitar la irrupción de la pomácea en el mercado interior con un plan que abarca desde la investigación sobre el terreno para maximizar calidad y cantidad, extremo en el que la Coag aporta a sus expertos, a la trazabilidad, manipulación, transporte y feliz ‘puesta en escena’ de la reineta.

Carlos Martel es ingeniero agrónomo de la Corporación insular y explica que el programa arranca con la colaboración de seis agricultores, tres mujeres y tres hombres, cinco de Valleseco y uno de Santa María de Guía, que suponen un ‘parque’ de 4.500 matos.

Un agricultor explica el cultivo de los manzanos a los representantes del Cabildo, el Ayuntamiento de Valleseco, Coag y Spar. La Provincia

La fisonomía de sus plantaciones es divergente, unos con exclusividad al manzano, otros con un mixturado de diferentes frutales e incluso plantaciones de papas, y también quienes los tienen en explotación en orillas, y es justo las que lo tienen entre otras variedades las que mayor rendimiento ofrecen. En todas esas fincas se hará un seguimiento técnico cuyos resultados puedan ser extrapolados a otras explotaciones susceptibles de incorporarse al proyecto.

Pero eso es solo el principio. Hará falta un lugar de acopio para ir centralizando la producción, y ahí es donde entran en juego las propias sidrerías de Valleseco, que recogen la fruta, y el Ayuntamiento, que cede un lugar en las instalaciones del mercadillo municipal para su almacenaje provisional.

Faltan las cajas, específicas y con la identificación del productor, que facilita el Cabildo, junto con asesoramiento y financiación, y por último Spar, «que se reveló como la novia perfecta», subraya Martel, para cuadrar el círculo, que se encarga de comercializar la reineta, a la que se podrán ir incorporando más variedades si el barco coge rumbo, siempre a un precio que suponga rendimientos para el agricultor.

Estas seis primeras fincas es solo la punta de lanza, que podrían rendir en torno a los dos mil kilos de manzana, una cantidad discreta para empezar pero que sirve perfectamente de clave para dar marcha a Manzana en Fresco.

Por estos motivos el consejero insular de Soberanía Alimentaria, Miguel Hidalgo, agradecía a Spar su implicación, al considerar que sin su colaboración «el proyecto no sería posible», mientras que el presidente de la cadena de supermercados, Ángel Medina, visiblemente satisfecho, reafirmaba su compromiso con el sector primario, «y con el que cultiva sus tierras con la garantía de venta de sus productos a unos precios justos, como ya realizamos con los convenios del tomate de La Aldea de San Nicolás, la naranja de Telde o la papa de la isla».