Un 89% de las subvenciones del Cabildo de Gran Canaria son directas y triplican a las de Tenerife

El informe de la Audiencia de Cuentas del año 2019 revela que las ayudas en concurrencia competitiva fueron mínimas y cuestiona el procedimiento de concesión

Firma de convenios entre el Cabildo y medio centenar de ONG, el pasado mes de abril

Firma de convenios entre el Cabildo y medio centenar de ONG, el pasado mes de abril / David Delfour

El Cabildo de Gran Canaria concedió en el año 2019 un total de 770 subvenciones por valor de 96,17 millones de euros, casi el triple del dinero otorgado por el Cabildo de Tenerife en el mismo periodo. Y el 89,1% de las mismas, que suponen el 84,5% de los fondos, se dieron por el procedimiento de concesión directa, «normalizando» ese método de pago de ayudas cuando en realidad se trata de «un procedimiento excepcional».  

Estas cifras y varias objeciones al comportamiento del gobierno insular, como la ausencia de informes de fiscalización o la «reiteración» de ayudas nominativas «a los mismos beneficiarios para objetos similares en años consecutivos», están recogidas por la Audiencia de Cuentas de Canarias en su Informe de fiscalización de la legalidad de las subvenciones concedidas por los cabildos insulares, ejercicio 2019, publicado el pasado 6 de junio y que se eleva este viernes al primer Pleno Ordinario de la corporación grancanaria en este mandato.   

Aunque las deficiencias detectadas por la Audiencia de Cuentas son comunes en la mayoría de los cabildos, las subvenciones otorgadas sin concurrencia competitiva, comunmente conocidas como «a dedo», son de largo más elevadas en Gran Canaria que en los otras seis islas.  

En Tenerife, la más equiparable a Gran Canaria en población y presupuesto, su Cabildo concedió 346 subvenciones durante ese año, menos de la mitad, por una cuantía total de 34,99 millones, casi tres veces menos. Entre las llamadas islas menores, el Cabildo de La Palma fue el que más utilizó el sistema de las subvenciones para gastar su presupuesto anual, 370 asignaciones por valor de 28,20 millones. Le siguen El Hierro con 259 (7,06 millones), Fuerteventura con 147 (8,85 millones), Lanzarote con 109 (28,15 millones) y La Gomera con 32 (2,27 millones).  

En el análisis sobre Gran Canaria, el informe señala que solo nueve de las 24 entidades que engloba el Cabildo concedieron subvenciones en 2019. El propio gobierno insular concedió la mayor parte de ellas, 653, de las que 68 fueron por concurrencia competitiva (10,33 millones) y 555 por concesión directa (56,46 millones). Le siguió el Instituto Insular de Deportes, con ocho ayudas en convocatoria abierta (2,09 millones) y 68 de forma directa (6,54 millones).  

El gobierno insular utilizó 555 veces un procedimiento «excepcional» para dar subvenciones

Las otras entidades fueron el Instituto de Atención Social y Sociosanitaria, siete subvenciones directas; el Patronato de Turismo, 25 directas; la Fedac, dos por concurrencia y 12 directas; el Consorcio de Viviendas, tres por concurrencia y dos directas; la Autoridad Única del Transporte, 17 directas; el Consejo Insular de Aguas, una de cada; y el Consejo Insular de la Energía, una en competitividad de los solicitantes.  

El informe recuerda que el Pleno del Cabildo aprobó el Plan Estratégico de Subvenciones (PES) de 2019 a mediados de diciembre del año anterior, «donde se detallan para cada área de la entidad, los objetivos estratégicos y las líneas de actuaciones».  

Sin embargo, afirman los auditores, «no consta informe sobre el cumplimiento de los objetivos que el PES de 2019 persigue ni hace referencia a los resultados de la evaluación de los planes anteriores». Este análisis, añaden, «permite medir el impacto o la cuantificación de la consecución de los objetivos planteados, y sirve de instrumento no solo de planificación sino también de seguimiento y control de los resultados de la actividad de fomento y la conveniencia o no de su mantenimiento o supresión».

Las deficiencias detectadas por el órgano fiscalizador son comunes a los siete cabildos

Asimismo, el documento subraya que «durante el ejercicio 2019 se observa que se aprobaron modificaciones presupuestarias y del PES para la inclusión de subvenciones nominativas» y que «en la justificación de dichas modificaciones no se observan la concurrencia de hechos excepcionales o de urgencia que motiven la necesidad de otorgar subvenciones directas», por lo que «este procedimiento podría desvirtuar el carácter de planificación de ambos instrumentos».

Sobre uno de los 53 expedientes analizados de forma aleatoria, el número 15, dice que «la elección del procedimiento de concesión directa es confusa entre las subvenciones directas nominativas y aquellas que se tramitan por razones de interés público, social o económico. Puesto que el Cabildo consideró que se cumplían los principios de publicidad, transparencia, concurrencia, objetividad y no discriminación exigidos en la concurrencia competitiva, señala que «por tanto se podría haber tramitado como tal».