Misión cumplida. El volcán de El Golfo (Yaiza), en cuyo cráter está el Charco de Los Clicos, ha sido la última travesía geológica del curso de analogía planetaria en el que han participado los astronautas de la Agencia Espacial Europea (ESA son sus siglas en inglés) Pedro Duque y Luca Parmitano y el ingeniero Matthias Maurer, perteneciente a Eurocom, el enlace de los astronautas y cosmonautas en órbita.
Durante cinco días Duque, Parmitano y Maurer, guiados por los instructores de la ESA, han recorrido diversos escenarios de Lanzarote para identificar muestras geológicas y volcánicas que por su similitud pudieran encontrarse en Marte debido al parecido de la Isla con el planeta rojo. Tinguatón, el Parque Nacional de Timanfaya, Caldera Blanca, cuevas del malpaís de La Corona, la zona del Mirador del Río y El Golfo han sido algunos de los escenarios estudiados.
En el ejercicio de ayer los astronautas y el ingeniero tuvieron que realizar una selección de muestras geológicas, como si estuvieran en una hipotética misión en Marte en la que se encuentran un volcán como el de El Golfo, y decidir cuáles de ellas llevarían para su estudio a los científicos de La Tierra. El Golfo es uno de ejemplos del erupciones hidromagmáticas, es decir, aquéllas que se producen cuando el magma en su ascenso hacia la superficie entra en contacto con el agua, lo que genera un caso extremo de explosividad.
Duque explicó que el objetivo de la sesiones es que "los astronautas aprendan geología suficiente como para después ser efectivos en caso de vayan a explorar otro planeta y, por eso, hemos conocido distintos tipos de procesos volcánicos en Lanzarote".
En un receso durante la sesión de este viernes en El Golfo Duque destacó que lo que más le ha llamado la atención es el muy buen grado de conservación de los volcanes de la Isla. " Cómo no va a estar Timanfaya así si en realidad había gente aquí escribiendo cuando se producía la erupción, que ocurrió hace nada", se sorprendió el astronauta español. Añadió que "la conciencia de preservación de la naturaleza geológica que hay en Lanzarote es superior a la que existe en otros sitios y aprovechando esa conciencia es por lo que hoy nos encontramos así la Isla".
La formación de los astronautas en Lanzarote forma parte de la segunda fase del proyecto Pangaea, un sistema de entrenamiento que la ESA desarrolla en lugares similares a Marte. La primera parte tuvo lugar en Bressanone (Italia). Fue para reconocer rocas y meteoritos.
"Si seguimos aquí", apuntó Duque en referencia a futuras sesiones formativas de la ESA en Lanzarote, "vamos a traer astronautas de diferentes grupos de la ESA hasta que todo el mundo haya pasado por el curso".
Una preparación "compacta"
La posibilidad de que el hombre llegue a Marte no será una realidad "por lo menos hasta dentro de 10 o 15 años" auguró Duque, motivo por el cual no se ve con probabilidades de viajar hasta allí. Precisó que "la labor que estamos haciendo aquí es para la siguiente generación de compañeros con el fin de que todo esto esté completamente puesto en marcha y así ellos tengan una preparación compacta y con un contenido muy preciso".
Sobre las dificultades de aterrizar en Marte después de los 45 intentos que los científicos han hecho desde mediados del siglo XX, Duque comentó que "desde el punto de vista de ingeniería cuesta tanto porque nos vale mucho dinero hacer una prueba, ir hasta Marte y volver. Hacemos todo lo que podemos. Dedicamos mucho esfuerzo a hacer pruebas análogas pero no es lo mismo que probar en el sitio correcto", reconoció.
El geólogo Jesús Martínez, el único instructor español del grupo, subrayó que "en relación con Marte y la Luna, en algunos casos, Lanzarote es un auténtico museo geológico y un laboratorio natural donde podemos trabajar".
