El portaaviones Sao Paulo, que pertenecía a la Armada de Brasil, está siendo remolcado por el canal entre Gran Canaria y Fuerteventura, camino del astillero turco Sok Denizcilikve Tic, que está especializado en el desmantelamiento de barcos que han quedado fuera de servicio.

El barco militar fue comprado en el año 2000 a Francia, siendo dado de baja hace cinco años, y vendido ahora por 1,9 millones de euros. Es un barco de 265 metros de eslora y 51,2 de manga, y venía remolcado por el Alp Centre. Las autoridades marítimas españoles no le autorizaron acercarse a menos de cuatro millas, manteniéndose su paso bajo estrecha vigilancia.