Triana, protagonista del Cupón de la ONCE

La histórica y comercial calle de Triana de Las Palmas de Gran Canaria ilustrará el cupón de la ONCE que se venderá el próximo martes, 6 de febrero. Cinco millones de cupones difundirán la imagen de una de las vías más populares de la ciudad dentro del cupón diario, que tiene un precio de 2 euros. El acto fue aprovechado por el presidente del Consejo Territorial de la ONCE en Canarias Miguel Ángel Déniz para solicitar ayuda al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria para convertirla en la primera vía de Canarias con accesibilidad universal.

No es la primera vez que un rincón de la capital grancanaria es imagen de los billetes de la ONCE, aunque sí lo es en la serie ‘A pie de calle’, que ya ha difundido las calles más emblemáticas de 50 ciudades españolas. Próximamente, le tocará el turno a la calle Castillo de Santa Cruz de Tenerife.

El ganador obtendrá un premio de 500.000 euros si consigue acertar el número más la serie. También habrá 49 premios de 35.000 euros a las cinco cifras del número premiado además de otros 450 premios de 240 euros a las cuatro primeras cifras y otros 450 premios a las últimas cifras, aparte de premios menores.

El cupón fue presentado este miércoles por José Antonio López, delegado de la ONCE en Canarias; Miguel Ángel Déniz, presidente del Consejo Territorial de la ONCE en Canarias y Carmen Luz Vargas, concejala de Gobierno del Área de Bienestar Social del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, en la sede de la Delegación Territorial de la ONCE en Canarias (Las Palmas de Gran Canaria).

Historia

La calle y el barrio de Triana, declarado Bien de Interés Cultural de Canarias como conjunto histórico en 1993, surgió de la prolongación de la ciudad del Real de Las Palmas, fundada en el siglo XV, en lo que hoy conocemos como barrio de Vegueta. Desde sus orígenes, la calle estuvo muy ligada a los comerciantes sevillanos, ya que Sevilla era el puerto español desde donde partían todos los buques y mercancías que llegaban a la isla y en dirección a América cuando Gran Canaria estaba bajo la corona española, pero también porque parte de sus pobladores procedían de la ciudad andaluza. No en vano, el primer puerto de Las Palmas de Gran Canaria se asentaba en lo que hoy es el parque de San Telmo, donde termina la calle, que se inicia en el barranco de Guiniguada. Más tarde llegarían los comerciantes malteses, ingleses e indios.

La calle comercial y el barrio de Triana es Bien de Interés Cultural de Canarias en la categoría de conjunto arquitectónico desde 1993

Desde el inicio, Triana estuvo relacionada con el ámbito comercial. En ella se levantaban almacenes y se asentaban los gremios artesanales, así como las primeras pequeñas industrias de la ciudad, aunque tardaría más de medio siglo en tener el aspecto que hoy conocemos. Fue precisamente el arquitecto municipal Manuel Ponce de León el encargado de alinear la calle, que tenía forma irregular, a mediados del siglo XIX con el derribo de varias viviendas. Al inicio del XX, la calle, que tiene una longitud de 650 metros, ya tenía el trazado actual y en ella comenzaban a edificarse diversos inmuebles, encargados por los principales comerciantes e industriales de la época, que embellecerían su itinerario.

Muchos de estos edificios permanecen aún en pie, aunque ya no cumplen la función de viviendas que tenían al inicio de su construcción. Entre los inmuebles que se encuentran protegidos figura el número 35 de la calle, levantado por el mismo Manuel Ponce de León, donde se puede ver aún el reloj que marcaba el horario comercial de la calle, propiedad de un joyero alemán que tenía allí el negocio. También la Casa Cardoso, en el número 61; la Casa Lleó, en el número 65, y el conjunto arquitectónico de casas modernistas situados entre los números 76 y 82.

La imagen elegida para ilustrar el cupón parte de la esquina de Constantino en dirección al parque de San Telmo, donde se puede ver precisamente uno de los inmuebles modernistas más característicos de la vía.

Triana no solo acoge importantes edificios históricos, sino que tiene una importante historia dentro de Las Palmas de Gran Canaria, aparte de la vertiente comercial. Por ella pasó el tranvía La Pepa, que unía el Puerto con la ciudad; cuyos raíles aún pueden verse en un tramo, y también los ilustres que llegaban a la ciudad como Alfonso XIII y Primo de Rivera; entre otros. En ella se ubicaron además organismos oficiales como el Gobierno Civil y el Cabildo insular durante algún tiempo y se llenó de gente para celebrar fiestas y acontecimientos importantes para la ciudad.

El presidente del Consejo Territorial de la ONCE en Canarias, Miguel Ángel Déniz, destacó que es un honor que Triana salga en un cupón de la institución, ya que se trata de una de las Zonas Comerciales Abiertas de la ciudad con un importante legado histórico dentro de la ciudad. Déniz aprovechó el momento para pedir al gobierno municipal de Las Palmas de Gran Canaria que trabajen juntos para convertir la vía en la primera de Canarias con accesibilidad universal. Es decir, que no solo se rebajen barreras arquitectónicas para facilitar la entrada en los comercios, sino que se instalen también QR u otros dispositivos que, a través de la geolocalización, permita a las personas con dificultades visuales detectar frente a qué comercio se encuentran, qué venden, así como el horario. "Hay cosas que se pueden hacer y no todo depende de cuestiones económicas, sino de voluntad. Una sociedad necesita de buenos ejemplos y Triana podría ser la primera calle de Canarias que cuente con una accesibilidad universal si hay voluntad", dijo.

La concejala de Bienestar del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Carmen Luz Vargas, se comprometió a corregir con la ONCE las deficiencias que hay en la calle y a colaborar para que Triana pueda llegar a la categoría de accesibilidad universal. Y agradeció a la institución, tanto la publicidad que van a hacer de la ciudad en toda España con la venta de este cupón como por la labor social que realizan.

El delegado de la ONCE en Canarias, José Antonio López, señaló que en la calle de Triana trabajan a lo largo de la semana más de una decena de vendedores gracias a la actividad comercial y de restauración que hay en ella, y también por ser uno de los tramos de la ciudad más transitado por residentes y turistas.