La participación de la selección española en la fase de grupos del Mundial de Brasil será multicolor. Y es que el conjunto dirigido por Vicente del Bosque vestirá una equipación distinta en cada uno de los tres partidos de esta fase, tanto el de Holanda ya disputado como los pendientes contra Chile y Australia.

En su debut mundialista contra la selección holandesa el 13 de junio, los jugadores de la Roja lucieron una novedosa elástica blanca que no saldrá a la venta y cuyo origen tiene una rocambolesca historia. Inicialmente, los responsables de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no tenían previsto llevar en su equipaje ninguna camiseta ni pantalón de este color, pero se han visto obligado a hacerlo por imperativo legal de la FIFA, que ha obligado a los máximos dirigentes del fútbol español y a la empresa responsable del vestuario del combinado nacional a incluir una equipación alternativa a las dos que había presentado ya el actual campeón del mundo.

A petición del todopoderoso negocio de la televisión, el máximo órgano del fútbol mundial obligó en su día a los 32 equipos participantes en Brasil 2014 a presentar dos equipaciones totalmente opuestas, una en la que predomine el color oscuro y otra de tonalidades claras. Bajo este criterio, la RFEF presentó dos modelos de vestuario para sus jugadores: una primera equipación totalmente roja y otra más atrevida de color negro con toques de amarillo fluorescente.

A la FIFA, sin embargo, esta elección no le pareció bien, ya que consideró que este segundo equipo no cumplía el requisito de ser de tonalidades claras opuestas a la roja. Por ello, obligó a los responsables del fútbol español a elegir un tercer vestuario. Ante esta petición, Adidas quiso evitarse más problemas y diseñó una camiseta alternativa completamente blanca, color con el que la selección de Del Bosque se enfrentará al combinado holandés -que vestirá de azul y no en su tradicional naranja- en su debut mundialista.

Los aficionados sí pudieron disfrutar del color habitual de 'La Roja' en su segundo partido en Brasil 2014. Contra Chile, el combinado nacional recurrió a su equipación clásica, totalmente roja y con las bandas y detalles en dorado. Además, incluye en la zona del pecho la insignia que la identifica como campeona del mundo en el Mundial del 2010. Se trata, según sus creadores, de simbolizar la pasión que representa el rojo con el significado de victoria del dorado.

Por su parte, es lunes en su última partido en el Mundial de Brasil, la selección española lucirá una equipación negra y amarilla fluorescente. Se trata de una revolucionaria combinación que España estrenó el pasado 5 de marzo en el partido que disputó en el Vicente Calderón contra Italia y que combina unas tonalidades nunca utilizadas hasta ahora en el vestuario del equipo español.

El negro predomina en toda la elástica, mientras que el color flúor amarillo está presente en el escudo, el logo de Adidas y las franjas en los hombros. "Con esta nueva equipación, negra y flúor, se simbolizan algunos de los rasgos más significativos del carácter español: un carácter muy vivo, alegre, bullicioso, social y lleno de color", explicó en su día Adidas para presentar este atrevido diseño.

Con estas equipaciones en rojo, negro y blanco, la selección española ha abandonado el color azul -en sus tonalidades cielo y marino- que había lucido durante su participación en las últimas competiciones oficiales, la Eurocopa 2012 y durante la pasada Copa Confederaciones también disputada en tierras brasileñas. En cualquier caso, el azul no estará ni mucho menos ausente en la España participante en el Mundial de Brasil 2014. Y es que este color es el que utilizarán bajo palos Iker Casillas, Pepe Reina y David de Gea.

Desgraciadamente, en esta ocasión esta combinación de colores no ha traído nada de suerte a la selección española, eliminada en la primera fase de grupos del Mundial de Brasil.