Puede despertar el rechazo y el interés, porque tiene recursos para ello, y conseguirá, asimismo, desvelar un mundo peculiar en el que el sexo menos conformista y más impactante desfilan a sus anchas, pero nunca pasará inadvertido. Por eso hay que congratularse de que su cine irrumpa de nuevo en las carteleras. Hacía diez años, desde que vimos la excelente 'El libro negro', que no teníamos en España noticias suyas, ya que la única película que ha dirigido desde 2006, 'Steekspel', no se ha estrenado en nuestras pantallas.

Afortunadamente el cineasta holandés Paul Verhoeven todavía tiene muchas cosas que decir y más aún desde que se ha instalado de nuevo en su Holanda natal tras una larga estancia en Estados Unidos. Buena prueba de ello es esta coproducción entre Francia, Alemania y Países Bajos, 'Elle', que volverá a sembrar el desconcierto de muchos por su tendencia, inequívoca y perenne, a contemplar el sexo en primer plano y a interpretarlo desde posiciones realmente singulares y, desde luego, chocantes. Esta es una cinta que sorprenderá a muchos, sobre todo a quienes traten de buscar explicaciones lógicas que no están nunca en el ánimo del cineasta. Y es que el autor de títulos tan impactantes y audaces como 'Robocop', 'Desafío total' e 'Instinto básico' fue también un auténtico pionero en materia sexual, logrando ya en 1973 un éxito internacional con la libertina 'Delicias turcas'.

Partiendo de una novela de Philippe Djion, Verhoeven ha tratado de involucrarse en la intimidad de Michele, una mujer que se ha abierto camino en el universo del software y que ha sido víctima de una terrible violación. Un desconocido, que utilizaba una máscara y que ha penetrado en su casa forzándola, ha roto su resistencia con una terrible violencia. Lo sorprendente, sin embargo, es la reacción posterior de Michele, que no parece demasiado traumatizada por el tema y que solo lo ha contado a sus familiares días después, negándose a presentar denuncia ante la policía. Podría ser que no quisiera que saliera de nuevo a la luz su trágico pasado, vinculado a un padre que fue un psicópata que sigue vivo y en prisión.