El alcalde invicto de La Orotava, Isaac Valencia, nacionalista de pro, que ha alicatado todo el valle de plataneras presidido por el Teide gigante que en otros tiempos maravillaba a propios y turistas, y al mismísimo Humboldt, ha afirmado que "en cualquier momento los moros invaden Canarias".

En la misma entrevista de ´La Opinión´ afirma con orgullo que ha multiplicado la cultura en su pueblo, y relata el número de colegios, institutos y bibliotecas que ha creado. Aquí falla algo.

El ex presidente socialista Felipe González también parece que es como la Ley de Costas, que se va sin haber llegado, desde que combina el honorable título de ex con el glamour de la ´creme´ y los consejos de administración. Preguntado sobre los desahucios y los ´escraches´ contesta (miércoles 10 de abril) que "porqué un niño tiene que aguantar presión en la puerta de su casa". Debe ir mucho a la ópera y ver poco los telediarios. Allí casi todos los días las cámaras recogen a asustados niños que lloran en brazos de sus padres, o se refugian tras ellos, cuando la policía, liderada por un secretario judicial, los echa de sus casas. ¿Porqué los niños tienen que soportar presión en la puerta de su casa?, pregunta retóricamente González. Pues eso. Pero aplicado a todos los niños.

Soraya Sáez de Santamaría, vicepresidenta del gobierno de Rajoy iba por esa línea suburbana en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del viernes. "Mi casa es otro terreno, es el de mi vida personal y, sobre todo, el de mi familia". Que es justo lo que piensan los desahuciados que llevan a cabo los ´escraches´, pacíficos en su denuncia y protesta. Ellos creen, como la vicepresidenta impasible, que la culpa de no poder cumplir con los plazos, y los intereses usurarios, no son culpa de ellos. Y que la pérdida de trabajo es una cosa, y otra, y ahí están de acuerdo con el PP, su casa, que es otro terreno, "es el de mi vida personal". La respuesta correcta la ha dado el juez Cobo Plana desde Lanzarote.

María Dolores de Cospedal dice que los escrachadores son nazis. Es un tic peligroso este de considerar que todas las protestas, y los gritos de auxilio, son cosa de extremistas, izquierdistas y nazis. ¿Quién es quién acosa aquí? Cuando Gallardón impuso las tasas judiciales ´disuasorias´ que impiden a los más desfavorecidos ejercer el recurso ante los actos de la administración ya se dijo que estas soberbias tendrían inevitables consecuencias, y que el abanico de endurecimientos, respaldado por un mayor uso de la porra y las sanciones, produciría conflictos sociales. No digan que no estaban avisados. Llamar ´nazis´ a millones de personas - las que firmaron la ILP contra los abusos hipotecarios, las que se manifiestan, las que están en paro por culpa ajena y pierden sus hogares por culpa bancaria, sí que es escrachador.

Y, cuidado. Ha vuelto a hablar Montoro con su habitual lenguaje de dos o tres lados (por no decir caras, que parece más basta expresión). Ha dicho que no habrá nueva subida de impuestos, y lo ha proclamado con su natural gallardía echada palante, para añadir a continuación que lo que habrá es una "reestructuración de impuestos" porque en España todo el mundo coincide en que la presión fiscal "es anormalmente baja". Y en esa palabra, anormalmente, pensaba yo.

Mientras se prepara el aceite para seguir friendo a las clases medias otro político, de UPN, primo hermano del PP, el ex presidente navarro Miguel Sanz , imputado por el escándalo de Caja Navarra asegura que él "nunca jamás" se ha "lucrado" con las dietas. Caja Navarra pagaba dietas de 2.600 euros la reunión, y había días que se celebraban tres. Al cabo del año el señor Sanz, el que nunca se ha lucrado con las dietas, cobraba más por ese concepto que por su sueldo público. ¿Creerá que los navarros y los españoles en general son anormales? ¿O se estará mirando al espejo? Varios presentadores y tertuliantes de las ´TDT party´ están que trinan contra el decreto andaluz que prevé la expropiación temporal de las viviendas vacías en manos de bancos e inmobiliarias y una multa de hasta 9.000 euros, todo ello con determinadas condiciones. Burla a la Constitución, comunismo, bolchevismo, troskismo... desafío a los derechos de la propiedad privada. No se refieren a la expropiación de las pagas de funcionarios y pensionistas; se refieren solo a las casas obtenidas abusivamente - ya hay doctrina europea al respecto-y cerradas con intención especulativa. En Europa ese tipo de medidas está muy extendida. ¿Son acaso bolcheviques los gobiernos de Gran Bretaña, Holanda, RFA, Francia...? Pues sí, resulta que van a necesitar clases de apoyo de ´Educación para la Ciudadanía´.