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Alfonso González Jerez

Retiro lo escrito

Alfonso González Jerez

Sara Cabello

Sara Cabello

Uno de los acontecimientos más rarunos de la política municipal tinerfeña –y canaria—ha sido la reciente dimisión como concejal del ayuntamiento de El Rosario de Sara Cabello, primer teniente de alcalde y responsable de casi todas las áreas estratégicas del gobierno municipal presidido por el alcalde Escolástico Gil. La tajante renuncia de Cabello – no solo abandonó las áreas de gestión que desempeñaba, sino el acta de concejal – dejó atónito a todos los vecinos, empezando por el alcalde, quien al parecer no llegó a creerse que su segunda cumpliera lo que le había dicho unos pocos días antes.

Escolástico Gil fundó Iniciativa por El Rosario en 2003 –enseguida coaligada con Los Verdes -- para acabar con lo que consideraba un mal y maloliente gobierno por el entonces alcalde, el socialista Macario Benítez. Durante doce años practicó una oposición valiente y rigurosa que le llevó incluso a denunciar el llamado caso Varadero – un episodio de una descarada corrupción urbanística – que se sustanció en una condena judicial de siete años de inhabilitación a Benítez. En las elecciones de 2015 consiguió por fin la alcaldía y en 2019 amplió sus apoyos y le bastó un pacto con Si se Puede – que había obtenido un concejal – para conseguir un gobierno estable. Fue entonces cuando se incorporó a la candidatura de IR-Los Verdes la joven Sara Cabello, procedente del PSOE, para cuyos concejales había trabajado como asesora los tres años anteriores. En muy poco tiempo Cabello demostró una extraordinaria capacidad de organización, de trabajo y de conexión con los vecinos. En realidad Gil y Cabello acabaron formando un equipo de dirección que se complementaba muy bien en lo político y en lo caracterológico: el alcalde presidía, tomaba decisiones estratégicas y mantenía las relaciones con el Gobierno autonómico y el Cabildo de Tenerife; la teniente de alcalde ordenaba la acción política del equipo de gobierno y desempeñaba áreas como Hacienda, Régimen Interior, Seguridad Ciudadana, Aguas, Protección Civil e Igualdad. El ayuntamiento está saneado y ha recibido fondos que se han invertido en mejorar servicios y en numerosas obras públicas inauguradas en el último año. El acuerdo entre IR Los Verdes con Nueva Canarias –en virtud del cual Gil y los suyos apoyan a NC, muy modestamente, para el Cabildo tinerfeño y el Parlamento – ha facilitado la relación del alcalde con el consejero de Hacienda y Presupuestos, Román Rodríguez, lo que sin duda ha sido beneficioso para el pequeño pero afanoso ayuntamiento.

Nadie dudaba que Escolástico Gil se presentaría en los comicios 2023 y que Sara Cabello lo acompañaría de nuevo en la lista como fiel y laboriosa escudera. Pero todo se ha desmoronado a raíz de la dimisión de Cabello en el último pleno municipal. Es difícil averiguar las razones del desencuentro, aunque se rumorean luchas intestinas en IR Los Verdes y operaciones para desgastar la imagen de la primera teniente de alcalde que no tienen su origen, precisamente, entre los concejales de la oposición. Es una práctica habitual y abominable y no todo el mundo la soporta. Tal vez eso es lo que ha ocurrido con Cabello: no estaba dispuesta a tolerar basurilla ignominiosa en la puerta de su despacho cada mañana. «Espero que en estos siete meses que quedan», explicó en el pleno dirigiéndose al alcalde, «seas capaz de arreglar algunos asuntos internos que tienes que arreglar». Gil le agradeció secamente los grandes servicios prestados y nada más.

Que Sara Cabello, un caso insólito de coherencia política, probidad personal y capacidad profesional, se vea obligada a dejar la política municipal es decepcionante. Que su dimisión la rodee el silencio de Escolástico Gil y sus demás compañeros, un asco.

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