Unos 5.000 canarios desconocen que tienen cardiopatías hereditarias, que son las principales causantes de muerte súbita entre jóvenes y deportistas. El 80 por ciento de estos fallecimientos fulminantes se podría evitar si se encuentra a las personas que padecen estas enfermedades heredadas, algo que es posible hoy en día gracias a los avances de la genética.

Así lo manifestó ayer, tras participar en el Foro Cardiológico del Colegio de Médicos de Las Palmas, Lorenzo Monserrat, investigador del Hospital Universitario de La Coruña y director del centro Health in Code, donde se diagnostican casos de más de una treintena de hospitales españoles.

Monserrat hizo hincapié en que muchas de estas cardiopatías no presentan síntomas y que suelen ser detectadas en revisiones de empresa o deportivas. El investigador señaló que por cada caso que llega a la consulta, detrás hay otros cuatro que pueden ser detectados por estudios genéticos, por lo que es fundamental que el médico valore las patologías hereditarias del paciente. "La genética debe dejar de ser una investigación para empezar a aplicarse", puntualizó el especialista.

El experto recalcó que en Canarias es más fácil acotar mutaciones y familias al tratarse de una población "relativamente aislada", como sucede también en otras comunidades, como Galicia. Por lo que también la posibilidad de lograr curaciones es mayor, tanto en enfermedades del corazón como en otras patologías.

Monserrat quiso dejar claro que la muerte súbita "no es algo tan frecuente" y que se puede prevenir llevando una alimentación equilibrada y haciendo ejercicio. "Es más fácil tener un accidente de tráfico", añadió.