El vuelo de reconocimiento realizado ayer por los científicos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) con la Unidad de Helicópteros de la Guardia Civil, ha observado la presencia de balones o globos de lava de gran tamaño en el Mar de Las Calmas de El Hierro. El Involcan afirma que algunos medían más de dos metros.

La diferencia entre las temperaturas máximas y mínimas reflejadas llegó a ser de 4,9 grados centígrados.Científicos del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (Iter), organismo dependiente del Cabildo de Tenerife y en la actualidad formando parte del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), han informado a la dirección del Plan Especial de Protección Civil por Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca) sobre una serie de anomalías térmicas registradas ayer en el ambiente superficial del agua afectada por la erupción submarina de El Hierro.

La Administración insular indica en un comunicado que los datos recogidos son ligeramente superiores a los observados durante el pasado diciembre. Las diferencia entre las temperaturas máximas y mínimas reflejadas en el Mar de Las Calmas fueron realizadas mediante el uso de cámaras térmicas en posición móvil aérea, con la colaboración de la Unidad de Helicópteros de la Guardia Civil. En el vuelo, realizado el siete de enero, participó el catedrático del Instituto Tecnológico de Tokio, en Japón, Kenji Nogami, máximo asesor científico del Gobierno Japonés sobre erupciones volcánicas submarinas.

La diferencia entre las temperaturas máximas y mínimas reflejadas llegó a ser de 4,9 grados centígrados. El rango de valores observados para esta diferencia de temperaturas reflejadas ha sido de 1,5 grados centígrados a 9,1. Sin embargo, la Organización señala que la diferencia no superaba los 3,0 grados centígrados en los registros realizados por los vuelos científicos del Involcan con la Unidad de Helicópteros de la Guardia Civil durante el pasado mes.

Además, ayer se observó la presencia de balones ó globos de lava de gran tamaño, algunos de ellos con una medida superior a los dos metros, que ascendían a la superficie del mar y flotaban gracias el gas volcánico atrapado en su interior, llegando a registrarse temperaturas de 85,5 grados científicos.

Desde mediados de octubre de 2011 los mayores valores observados entre las temperaturas fueron de 8,3 grados centígrados, 6,8 y 9,1 grados, registrados durante los días 6, 7 y 8 de noviembre de 2011. Las anomalías tuvieron lugar antes del del intenso burbujeo observado el pasado 8 de noviembre, que elevó agua, gas y ceniza en suspensión que alcanzó varios metros sobre la superficie.

El Involcan explica que las diferencias reflejadas en el ambiente superficial de las aguas marinas afectadas por la erupción reflejan "claramente un importante flujo de calor como consecuencia de la actividad eruptiva, y permite ser una herramienta adicional para la monitorización de la evolución del proceso eruptivo al sur de La Restinga".