El satélite Sentinel-2B, con una innovadora cámara multiespectral de alta resolución capaz de fotografiar inundaciones, erupciones volcánicas o incendios, pasó ayer con éxito los test de prueba antes de ser trasladado a Kurú (Guayana Francesa), desde donde será lanzado al espacio en marzo de 2017. Éste será el quinto de los satélites del Programa Copérnico que Europa pondrá en órbita, después del Sentinel-1A y 1B, el Sentinel-2A y el 3A y está previsto que al día, en cuanto entre en funcionamientos, enviará unos 60 minutos de datos en varias etapas, a las antenas de Maspalomas (Islas Canarias), Matera (Italia) y Svalbard (Noruega). Los datos del Programa Copérnico accesibles y gratuitos a través de internet.

Así lo presentaron, ayer, en rueda de prensa los responsables del satélite, que desde hace dos meses se encuentra en una sala limpia del Centro Europeo de Investigación y Tecnología Espacial (Estec, en sus siglas en inglés), de la Agencia Espacial Europea (ESA).

Este centro está en la ciudad holandesa de Noordwijk y por su sala limpia pasan los satélites europeos antes de ser lanzados al espacio, para comprobar su tecnología, resistencia y diseño.

El Sentinel-2B superó varias simulaciones y pruebas, practicadas en las mismas condiciones de vuelo para comprobar, por ejemplo, las vibraciones y la temperatura que sufrirá o las comunicaciones que tendrá que usar.

"Sentinel-2B, el próximo satélite del Programa Copérnico, pasó las pruebas satisfactoriamente en Estec y ahora será ensamblado y trasladado a la base europea de lanzamiento en Kurú", señaló el director del Programa de Observación de la Tierra de la ESA, Josef Aschbacher.

Será trasladado en un contenedor, en una primer trayecto en camión y luego en avión, hasta Kurú, para ser lanzado al espacio en un cohete Vega. La ventana de lanzamiento está programada del 28 de febrero al 8 de marzo y ahora la ESA espera confirmación de Arianespace -compañía que comercializa los cohetes Ariane, Soyuz y Vega- sobre el día concreto para el despegue.

Los satélites Sentinel-2 tienen por objetivo proporcionar datos sobre la gestión del medio ambiente -por ejemplo, a partir de ellos se podrán generar mapas de zonas quemadas por incendios- y sobre la gestión de áreas agrícolas, para caracterizar cultivos y a partir de ahí establecer estrategias para optimizar los fertilizantes.

También se podrá hacer seguimiento de la deforestación o desertificación de algunas zonas y estudiar el impacto del cambio climático, por ejemplo analizando el retroceso de los glaciares.

Los terremotos son otro de los objetivos, como los últimos de Italia, de los que el Sentinel-2A pudo tomar imágenes. Los Sentinel-2 A y B orbitarán a 786 kilómetros y cada cinco días cubrirán la superficie terrestre gracias a la cámara multiespectral con 13 bandas (a más bandas más materiales en tierra se podrán identificar) de alta resolución, con un campo de visión que barrerá 290 kilómetros.