El ritmo de vida actual, el estrés, la ansiedad, la mala alimentación e, incluso, la falta de sueño, o los cambios hormonales afectan, más de lo que se puede pensar, a la salud sexual femenina. El bienestar comienza por uno mismo y por este motivo Procare Health se ha querido sumar al Día Internacional del autocuidado, que cada año se celebra el 24 de julio (24/7) como símbolo de que sus beneficios se pueden disfrutar las 24 horas del día los 7 días de la semana.

Cuidarse para vivir mejor y disfrutar más. Así, pautas tan sencillas como conocerse mejor, una adecuada higiene íntima y, por supuesto, hábitos de vida saludable como comer bien, practicar deporte y huir del estrés, completan un ciclo de autocuidados que contribuye a mejorar la salud sexual de las mujeres, haciendo que sus relaciones sean más cómodas y placenteras. Además, de aumentar su libido, reducir la sequedad vaginal y mitigar otras molestias que les impiden desarrollar una vida sexual plena y satisfactoria:

Conocerse bien

El Autoconocimiento o autodescubrimiento del propio cuerpo de la mujer es la base para el cuidado personal de su salud sexual. Así, la exploración es siempre el paso previo no solo para conocer el correcto funcionamiento de los órganos sexuales, sino también para detectar pequeñas lesiones o afecciones que pueden influir en el normal desarrollo de las relaciones causando dolor o pequeñas molestias.

Sencillas pautas de cuidado íntimo

Por supuesto, la salud está estrechamente relacionada con la higiene íntima y con seguir unas sencillas pautas de aseo diario. Además, de la frecuencia o del tipo de jabón empleado -mejor líquido o espuma, con pH adaptado y sin parabenos- es importante recordar que es más apropiado utilizar ropa interior de algodón, cambiarla siempre que esté húmeda y evitar las prendas excesivamente ajustadas que favorecen la sudoración de la zona íntima, llegando a producirse alteraciones de la microbiota vaginal.Comer bien para sentirse mejor

Más allá de afrodisiacos capaces de incrementar el deseo sexual, una alimentación sana y equilibrada es esencial para el día a día y, también, para la salud sexual. Así, una dieta baja en proteínas disminuye los niveles de testosterona, mediador clave en el deseo sexual femenino, que provoca a su vez la disminución de la libido y sequedad vaginal volviendo dolorosas las relaciones sexuales.

Un merecido descanso

Dormir también afecta a la salud sexual femenina. Están tan estrechamente relacionados que, a mayor cantidad y calidad de sueño, mayor rendimiento en todas las actividades diarias y, también, mejor respuesta sexual. Hacerlo menos de ocho horas o con poca calidad altera la concentración, la memoria el aprendizaje y puede afectar a los sistemas hormonales y, por tanto, a la vida sexual.

Practicar algún deporte

Otros hábitos saludables como la actividad física también son esenciales para la salud sexual. Yoga, pilates, natación, running, o algún tipo de baile€ son algunos de los más indicados. El deporte no solo mejora la capacidad física, sino que, además, entre otros aspectos, mejora el sistema cardiovascular aumentando el flujo sanguíneo en el clítoris, fortaleciendo el suelo pélvico y ayudando a relajarse.

Relajarse para huir del estrés y la ansiedad

El estilo de vida actual hace que debido a la falta de tiempo se tenga la permanente sensación de vivir al límite. En esta situación, el organismo empieza a producir cortisol, la llamada hormona de estrés, que disminuye los niveles de testosterona, causando inapetencia sexual.

Los cambios hormonales, especialmente, en momentos como la menopausia, se pueden manifestar los primeros síntomas de afecciones tan frecuentes como la atrofia vulvovaginal que provoca sequedad e inflamación de la vagina. En estas incómodas situaciones Idracare, gel vaginal con aloe vera y alta concentración de ácido hialurónico, indicado para hidratar la mucosa vaginal, ofrece un alto poder lubricante. Por este motivo, también se recomienda su uso en otros períodos de cambios hormonales como el ciclo menstrual, embarazo o lactancia.