Veterinarios del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre "La Tahonilla" han practicado este domingo la primera eutanasia en el mar a una hembra de calderón joven que fue avistada con una aleta seccionada a causa de una colisión con la hélice de una embarcación.

El veterinario de La Tahonilla, Santiago Mayans, que ha coordinado la acción junto con el Instituto de Sanidad Animal y Calidad Alimentaria (IUSA) de la Universidad de Las Palmas (ULPGC), Santiago Mayans, ha afirmado a Efe que practicar una eutanasia en el mar y en esas condiciones "es complicado" puesto que hay que cumplir un protocolo y hacerlo de forma "indolora" para que el animal no sufra.

"Se practicó en el mar porque era inviable trasladar al animal sin sedación previa", ha explicado Mayans, que ha insistido en que en todo momento se procuró una "eutanasia humanitaria".

Al calderón, ha relatado el veterinario, se le capturó con una red, una maniobra "nada fácil" que finalmente se pudo conseguir porque la lesión del animal hizo la operación menos compleja.

Posteriormente, aunque el procedimiento es llevar al animal a tierra, se le sedó hasta su muerte porque sus lesiones eran extremadamente graves e "inviables con la vida" ya que no habría podido sobrevivir "en ningunas condiciones", ni siquiera, ha apostillado Mayans, en un acuario porque "sería cruel" que en ese estado dependiese de los humanos.

El animal fue avistado en el mar, a la altura del municipio de Adeje y, por su edad todavía estaba acompañado de su madre, aunque ya lo había abandonado su manada a causa de la gravedad de sus heridas.

Mayans ha agregado que el cadáver fue trasladado a la Tahonilla, a donde se trasladó el equipo experto del IUSA y se le realizó una necropsia que ha concluido que la causa de la aleta seccionada era un traumatismo muy severo que produjo la fractura del calderón, "lo más probable es que fuese por una hélice de embarcación.

Sobre la muerte, el veterinario ha querido aclarar que está seguro de que en el suceso no está implicada ninguna de las entidades que conforman la plataforma de empresarios de avistamiento de cetáceos y que están incluidos en la carta de calidad del Cabildo de Tenerife.

"Nadie sabe quién pudo colisionar con el animal, pero es absolutamente improbable que hayan sido ellos. Lo normal es que sea cualquier persona ajena a esta actividad o una embarcación pirata", ha declarado Mayans en relación al alto número de embarcaciones sin permiso o "pirata" que realizan avistamiento de cetáceos sin respetar las normas.

El avistamiento de cetáceos, ha dicho Mayans, es una actividad "delicada" que debe hacerse con los profesionales recogidos en la carta de calidad de la corporación insular.

Por su parte, el consejero de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife, José Antonio Valbuena, ha subrayado a Efe que le pide al Gobierno de Canarias que legisle "de forma urgente" la regulación para los avistamientos de cetáceos.

"No es solo por la imagen que damos al turismo", ha explicado Valbuena, quien ha agregado que es una cuestión de "respeto" con la población de cetáceos de Canarias, que también "tienen derechos".