El sindicato ANPE va a solicitar a la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias la disminución de las ratios alumno-profesor, la reducción del horario lectivo del cuerpo de maestros a 23 horas semanales y el descenso de la carga burocrática como "retos irrenunciables" del próximo curso escolar. "El sistema público de enseñanza arrastra un déficit histórico de docentes que ha hecho que Canarias esté siempre a la cola en el número de alumnos por profesor en equivalente a tiempo completo", advierte en una nota Pedro Crespo, presidente de la organización en las islas.

De hecho, apunta que en la edición de 2019 del informe Sistema Estatal de Indicadores de la Educación (elaborado con datos de 2016-2017), en los centros públicos de las islas hay 12,2 alumnos por docente frente a los 11,5 de media estatal. "Sólo Cataluña, Andalucía y Madrid, además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, que no tienen las competencias transferidas, obtienen peores resultados, es decir, estamos entre las cuatro con menos recursos proporcionalmente y en el lado opuesto, como territorios modélicos, se sitúan Galicia, con 9,2 alumnos por docente, y Extremadura, con 9,6", e indica que al hecho de "estar a la cola" de las Comunidades Autónomas se une la "involución" que se ha experimentado en los últimos años.

Ley

El sindicato considera que la Consejería debe hacer una "verdadera apuesta económica" por la enseñanza pública, que pasa por el cumplimiento de la Ley Canaria de Educación, aprobada por el Parlamento a instancias de una iniciativa legislativa popular, y que establece que Canarias deberá invertir en 2022 el 5% de su PIB en Educación, "cifra que queda aún muy lejos de ser real". Crespo indicó al respecto que, a pesar del crecimiento de los presupuestos educativos, la inversión en la comunidad autónoma es inferior al 4%, "lo que pone de manifiesto el enorme reto que tiene por delante el nuevo equipo al frente de la Consejería de Educación.