La fiscalía y la acusación particular solicitan una condena de 12 años de prisión para un hombre acusado de abusar sexualmente varias veces de su hija de cuatro años tras perder la custodia en Palma. El acusado habría sometido a tocamientos a la niña durante los fines de semana que ella pasaba en su casa a lo largo de seis meses. La víctima está bajo tratamiento psicológico y los técnicos del IMAS consideran creíble su relato de los hechos. Tanto el ministerio público como el letrado Ramon Caubet, que representa a la madre de la menor, reclaman también que se prohíba al padre acercarse y comunicarse con la pequeña durante siete años y una indemnización de 20.000 euros. Está previsto que el juicio se celebre la próxima semana en la Audiencia Provincial.

La fiscalía relata que el procesado, de 43 años, cometió los abusos entre julio de 2015 y enero de 2016 en su vivienda en Palma . El hombre se había separado de la madre, a quien un juez concedió la custodia de los dos hijos de la pareja. Siempre según las acusaciones, el sospechoso sometió a tocamientos a la niña, que tenía entonces cuatro años, cuando los dos hermanos acudían a su domicilio los fines de semana, como estipulaba el régimen de visitas.

La acusación particular detalla en su escrito de conclusiones tres episodios diferentes ocurridos en julio y septiembre de 2015 y enero de 2016. El hombre presuntamente abordaba a la niña cuando estaba en la cama y la sometía a tocamientos en los genitales, llegando a introducirle los dedos en la vagina.

Los hechos fueron denunciados tras el último episodio. La niña fue atendida por técnicos del Institut Mallorquí d'Afers Socials (IMAS), que abrió un expediente. Los psicólogos de la institución elaboraron un informe, tras entrevistarse con la niña, en el que consideraron creíble su relato de los abusos. Tanto la víctima como su hermano fueron atendidos por la Unidad Terapéutica de Abuso Sexual Infantil (UTASI) de la conselleria de Asuntos Sociales. Según consta en el escrito de conclusiones provisionales de la fiscalía, los abusos sufridos generaron en la menor una situación de tristeza y ansiedad. También la madre recibió tratamiento psicológico.

Tanto el ministerio público como la acusación particular consideran al hombre autor de un delito continuado de abuso sexual. El abogado de la madre considera además que debe aplicarse la agravante de parentesco. Las dos acusaciones reclaman para el procesado, que no fue detenido por estos hechos, una pena de 12 años de prisión. También solicitan que se le imponga una orden de alejamiento para evitar que se acerque o se comunique con su hija durante siete años y una indemnización de 20.000 euros por los daños morales causados a la menor y su madre.

Está previsto que el caso sea juzgado el próximo jueves en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma. Las acusaciones han citado a declarar como testigos a la madre de la niña, a varios profesores del colegio al que acude la menor y a los expertos del Consell y el Govern que la han tratado para que expliquen el contenido de sus informes periciales.