El sindicato STEC-IC celebra que la Ley Orgánica de modificación de la LOE (LOMLOE) elimine los aspectos que, a su juicio, son los más lesivos de la LOMCE. Entre las reformas destacan la importancia de terminar con la segregación del alumnado, la eliminación de competencias a claustros y consejos escolares, la calificación de la materia de Religión y las reválidas. Igualmente, el sindicato considera que la Ley Celaá avanza en las nuevas medidas de admisión del alumnado en cuanto a la distribución equilibrada del alumnado entre la pública y la concertada, se elimina la posibilidad de establecer perfiles de profesorado.

Asimismo, la organización sindical se muestra satisfecha con que la coeducación, la inclusión e incluso la crisis climática sean aspectos centrales de la exposición de motivos. “La mayor autonomía de los centros educativos, la oferta pública para el ciclo 0-3 años, las prohibiciones de donar suelo público para la construcción de centros privados y de subvencionar colegios que segregan por razón de sexo”, son otras de las medidas más necesarias según el sindicato educativo del Archipiélago.

No asegura la financiación

Sin embargo, subrayan algunas carencias de la Ley, por lo que consideran que “está lejos de la transformación profunda que nuestro sistema educativo necesita”. Entre esos aspectos destacan que la Religión Católica debe quedar fuera del currículo escolar, porque “no es suficiente que no cuente para la nota media, que luego repercute en temas como la EBAU o la concesión de becas”. En ese sentido, la organización sindical advierte que “la laicidad debe ser una de las bases del sistema educativo en un estado aconfesional, como establece la Constitución Española que es el Estado Español”.

También estiman que hay que profundizar en la gestión democrática de los centros. “La LOMLOE, apenas mejora la cuestión, ya que la elección de las direcciones sigue dependiendo en gran medida de la administración”, afirma el sindicato. Que, a su ve, “echa de menos una reducción de ratio, imprescindible para una mejora de la calidad de la enseñanza”.

STEC reclama que la ley educativa del país reconozca la labor del profesorado y que mejore sus condiciones laborales. “El horario lectivo del profesorado en España es, sensiblemente, superior al del resto de países europeos”, destaca la organización en un comunicado.

Además, asegura que la nueva norma no establece una forma racional de Acceso a la Función Pública Docente, ya que el actual está desfasado. Al mismo tiempo, sostiene, ha de solucionarse la problemática de 170.000 personas interinas, casi un tercio de la totalidad del profesorado del sistema educativo público no universitario. “Hay que dar estabilidad a este profesorado, y esta ley tampoco lo establece”, denuncia el sindicato.

El STEC advierte de que la LOMLE no asegura una financiación del sistema público de enseñanza. También apuestan por la eliminación de la asignatura de Ética en la Enseñanza Secundaria Obligatoria es inaceptable. Y, señalan que la posibilidad de que el personal docente pueda ser separado de la docencia directa al alumnado por la Inspección, “otorga a ésta un poder desmesurado, mientras contribuye a denigrar la labor docente.”