La marca canaria de refrescos Clipper ha sido galardonada por su campaña "Échate un Clipper, y que digan lo que quieran". Esta acción promocional ha sido diseñada por La Escalera de Fumío, agencia creativa con una amplia experiencia en la consultoría de comunicación especializada en el sector de bebidas.

En un evento celebrado ayer en Madrid, los responsables de La Escalera de Fumío, recibieron el premio a la mejor campaña en la categoría de música, jingles y radio del Festival Internacional El Chupete. Se trata de la XVI edición de un certamen que reconoce a aquellas acciones de comunicación que tienen en cuenta los valores propios de la infancia a la hora de realizar acciones publicitarias, premiando a las mejores iniciativas que muestran especial respeto hacia el público infantil y juvenil.

Por otro lado, es la primera vez que una agencia canaria gana un premio del Festival Internacional El Chupete, lo cual es una muestra de la calidad de los trabajos que se realizan desde las Islas y del talento creativo con el que cuenta el Archipiélago. De hecho, las otras marcas que se disputaban un galardón en la misma categoría eran tan conocidas como por ejemplo Nutribén, con acciones desarrolladas por agencias de comunicación y marketing de mucho recorrido a nivel nacional.

Tal y como afirma el Director de Servicios al Cliente de la agencia creativa, Néstor Domínguez, "tras nuestro plan estratégico de reposicionamiento de Clipper, que requirió de un trabajo exhaustivo de análisis de mercado, hábitos del consumidor y notoriedad de la marca de más de cuatro meses de trabajo. comprobamos que tenía un punto fuerte imbatible: es una love mark, una marca muy amada en Canarias, y su principal atributo es la canariedad. Pero al mismo tiempo, necesitaba mostrar otros valores que lograran rejuvenecer la marca y acercarla a un público más adolescente. A lo largo de este proceso nos planteamos trabajar en un territorio nuevo, en este caso la música, sabiendo que nuestro target, los jóvenes, consumen habitualmente reguetón, trap y hiphop. Además, en Canarias hay muchísimo talento musical, por lo que decidimos apoyarnos en el artista y compositor de música urbana Juacko, para modernizar la marca y acercarla aún más a los jóvenes".

La pieza principal de la campaña, por la cual ha sido premiada, es un videoclip donde Juacko, acompañado por un grupo de bailarinas y de más artistas, lanza un mensaje de respeto hacia la libertad de elegir lo que quieras y de decidir hacerlo con quien quieras. Este video, que ha generado mucho impacto en plataformas digitales como Youtube y Facebook, es sólo una parte de toda una estrategia que se apoya en otros soportes.

En este sentido, Juancho Delgado, Director Creativo de la campaña, señala que "ideamos sacar la campaña a la calle buscando espacios diferentes donde también estuviesen los jóvenes, y con un lenguaje cercano a ellos. Por eso apostamos por la música y el arte urbano. Pero en lugar de utilizar vallas de la manera tradicional, invitamos a grafiteros para que ellos mismos las pintasen y además en lugares donde llegasen a nuestro público. Playas, parques, medios de transporte ... De este modo nuestro consumidor nos encontró de manera natural en sus lugares frecuentes. Por supuesto, también generamos numerosos contenidos digitales, el principal medio en el que están los amantes de Clipper".

La Escalera de Fumío ha vuelto a demostrar con este premio su capacidad de seguir generando interés en productos considerados como love marks. Uno de los puntos fuertes de la agencia es acompañar en el crecimiento del negocio no sólo en Canarias sino también en la península, puesto que son expertos en entender las motivaciones del consumidor canario y su relación con sus marcas de toda la vida.

Es el caso de Arehucas, Tropical, Elaborado en Canarias, Eidetesa,y ahora Clipper. Todas ellas marcas canarias que generan muchísimo compromiso entre sus consumidores y que forman parte de la historia y el desarrollo económico de las Islas. Hasta tal punto que mantienen un vínculo emocional con el público canario que va mucho más allá de, por ejemplo, tomarse un simple refresco.