Según el último censo de lince ibérico, correspondiente al año 2020, la población de estos animales en España ha superado los mil ejemplares. Los datos son esperanzadores y positivos. Se ha multiplicado su población por 10 en apenas 20 años, pasando de apenas 94 linces en 2002 a los 1.111 en 2020. ​Se trata de un gran éxito para la conservación en España y en el mundo. Pocas especies son capaces de escapar de una situación tan crítica como ha estado el lince ibérico. Este gran avance responde a un trabajo continuo y conjunto de más de 20 administraciones y organizaciones, además de muchos particulares, y donde desde WWF hemos trabajado sin descanso en los últimos 20 años con un papel muy destacado.