Solidaridad

Grupo Sabina entrega a Caritas Diocesana 19.856 kilos de alimentos

Este gesto altruista refleja el compromiso con la responsabilidad social del Grupo Sabina

Gonzalo Marrero Rodríguez, director de Cáritas Diocesana de Canarias (i), y Gilberto Castillo, Director Gerente de Sabina.

Gonzalo Marrero Rodríguez, director de Cáritas Diocesana de Canarias (i), y Gilberto Castillo, Director Gerente de Sabina. / La Provincia

En el corazón mismo de la solidaridad y el compromiso social, el Grupo Sabina ha renovado su compromiso anual con Cáritas Diocesana de Canarias. Este gesto altruista, que se ha convertido en una tradición arraigada durante once años, va más allá de una simple donación: es un símbolo del profundo agradecimiento de la empresa hacia la sociedad canaria y de su firme compromiso con la responsabilidad social corporativa.

Hablar de proporcionar alimentos de primera necesidad en pleno siglo XXI puede parecer, a primera vista, una paradoja, pero la cruda realidad es que la pobreza y la exclusión social siguen siendo desafíos persistentes en las Islas Canarias. Según el XIII Informe ‘El estado de la pobreza’, aproximadamente el 36% de la población canaria, casi 780,000 personas, se encuentra en riesgo de pobreza y exclusión social. Esta estadística, aunque muestra una mejora en comparación con años anteriores, subraya la necesidad urgente de acciones concretas para abordar la desigualdad y brindar apoyo a quienes más lo necesitan.

Juan Carlos Lorenzo de Armas, presidente de EAPN Canarias, presentó estos datos en el Parlamento de Canarias, destacando la importancia de seguir impulsando medidas sociales para cerrar la brecha. Si bien las medidas del escudo social implementadas durante la pandemia han contribuido a reducir estos números en los últimos dos años, la persistencia de la pobreza y la exclusión social indica que se necesita un compromiso continuo para abordar las causas subyacentes de estos problemas.

Gilberto Castillo, Director Gerente de Sabina y Gonzalo Marrero Rodríguez, director de Cáritas Diocesana de Canarias, rubricando la colaboración.

Gilberto Castillo, Director Gerente de Sabina y Gonzalo Marrero Rodríguez, director de Cáritas Diocesana de Canarias, rubricando la colaboración. / La Provincia

En un escenario tan desafiante como el actual, la labor desempeñada por Cáritas Diocesana de Canarias desde su fundación en 1955 adquiere una relevancia aún más significativa. A lo largo de los años, esta organización ha experimentado una notable transformación para hacer frente a diversas necesidades que han surgido en la sociedad. Desde sus humildes inicios, Cáritas se ha dedicado a una variedad de actividades altruistas, adaptándose de manera constante a los cambios económicos y sociales que han definido la región.

Uno de los pilares fundamentales de la labor de Cáritas ha sido la gestión de comedores y la distribución de alimentos, una iniciativa que ha evolucionado con el tiempo para abordar de manera efectiva la creciente problemática alimentaria en la comunidad. Desde asegurar el acceso a alimentos básicos hasta promover la seguridad alimentaria, Cáritas ha desempeñado un papel clave en la respuesta a las necesidades más apremiantes de las personas en situación de vulnerabilidad.

La comida ya ha salido en dirección a Cáritas Diocesana de Canarias.

La comida ya ha salido en dirección a Cáritas Diocesana de Canarias. / La Provincia

Asimismo, la organización ha demostrado una admirable capacidad de adaptación al diversificar sus esfuerzos y embarcarse en la creación de centros educativos. Estos espacios no solo han contribuido al desarrollo académico de la población menos privilegiada, sino que también han servido como refugios seguros donde se fomenta la inclusión social y se brinda apoyo integral a los individuos y familias afectados por la exclusión.

La heterogeneidad de las actividades de Cáritas Diocesana de Canarias refleja su compromiso inquebrantable con la misión esencial de proporcionar apoyo a aquellos que enfrentan condiciones de vulnerabilidad y exclusión social. Aunque la evolución de sus acciones ha sido necesaria para mantenerse al día con los desafíos cambiantes, la esencia de su misión ha perdurado a lo largo del tiempo: ser un faro de esperanza para aquellos que más lo necesitan.

Grupo Sabina ha sido una fuente de apoyo en la lucha contra la pobreza

La trayectoria de Cáritas Diocesana de Canarias es un testimonio elocuente de su capacidad para adaptarse y responder de manera efectiva a las complejidades de la sociedad contemporánea. Su compromiso continuo con la ayuda humanitaria, la educación y la inclusión social demuestra que, incluso en tiempos desafiantes, la solidaridad y la compasión pueden ser fuerzas transformadoras que generan un impacto positivo duradero en la vida de las personas.

En palabras de Gilberto Castillo, director gerente de Grupo Sabina, «el trabajo que realiza Cáritas Diocesana de Canarias es fundamental por la acogida y acompañamiento a las personas vulnerables y en peligro de exclusión social. La red de voluntarios, caracterizada por su dedicación desinteresada, juega un papel crucial al llegar a aquellos que pueden quedar fuera del alcance de otras administraciones. Cáritas Diocesana de Canarias, con años de experiencia y presencia en todas las islas donde hay tiendas del Grupo Sabina, se ha convertido en un pilar esencial en la lucha contra la desigualdad y la marginación social”.

La comida de Grupo Sabina que ya ha salido en dirección a Cáritas Diocesana de Canarias.

La comida de Grupo Sabina que ya ha salido en dirección a Cáritas Diocesana de Canarias. / La Provincia

Gonzalo Marrero Rodríguez, director de Cáritas Diocesana de Canarias, subraya la complejidad de la situación actual. Aunque los indicadores macroeconómicos pueden mostrar signos de mejora, la realidad palpable de las clases más vulnerables revela una disparidad preocupante. La persistencia de la brecha entre los beneficios económicos y la situación de aquellos alejados de los centros de poder destaca la importancia de una atención continua a las necesidades básicas de la comunidad.

En segundo lugar, la alarmante tendencia al aumento de nuevos pobres, especialmente entre los trabajadores precarios, merece una atención urgente. Aunque estos individuos tienen empleo, los salarios insuficientes les impiden cubrir necesidades esenciales después de los gastos obligatorios. La crisis de vivienda, exacerbada por la saturación del mercado de viviendas vacacionales, también persiste como un desafío significativo.

Datos reveladores señalan que el 85% de las ayudas actuales de Cáritas Diocesana de Canarias se destinan a alimentos, evidenciando el crecimiento de la incapacidad de las personas para llegar a fin de mes con una dieta adecuada. Además, las ayudas para vivienda, ya sea alquiler o prevención de desahucios, han cobrado una importancia crucial en un entorno en el que la vulnerabilidad se manifiesta en diversos aspectos de la vida cotidiana.

Travesía solidaria del Grupo Sabina

La colaboración continua del Grupo Sabina con Cáritas Diocesana de Canarias ha sido una fuente constante de apoyo en esta lucha contra la pobreza. La presencia del Grupo Sabina en el mundo de la perfumería no solo se destaca por su éxito comercial, sino también por su impacto positivo en la sociedad canaria. Sus establecimientos, reconocidos con prestigiosos galardones, no solo son lugares de transacciones comerciales, sino también espacios que ofrecen una experiencia única a los visitantes.

Además de contar con una sólida presencia en el ámbito comercial mediante sus numerosas tiendas físicas en Canarias, Grupo Sabina ha expandido significativamente su alcance mediante la incursión exitosa en el comercio on-line, convirtiéndose en un destacado referente digital en un lapso de tiempo sorprendentemente breve. La diversificación estratégica hacia el comercio en línea ha permitido al Grupo Sabina adaptarse a las cambiantes dinámicas del mercado, aprovechando las oportunidades que ofrece la esfera digital. La capacidad de llegar a un público más amplio a través de su plataforma ha impulsado la visibilidad de la marca, consolidando su posición como un actor destacado no solo en el ámbito local, sino también a nivel nacional e incluso internacional.

Un año más, Grupo Sabina dona el 1% de sus ventas en forma de comida a Cáritas

A medida que el Grupo Sabina ha prosperado en el entorno digital, ha sabido capitalizar la tecnología para no solo satisfacer las necesidades del consumidor moderno, sino también para liderar iniciativas que generan un impacto positivo en la sociedad. La versatilidad de su enfoque comercial, combinada con su compromiso social, ha consolidado la reputación de Grupo Sabina no solo como una entidad empresarial exitosa, sino como un agente de cambio en el tejido social.

El compromiso del Grupo Sabina con la solidaridad y la responsabilidad social corporativa se manifiesta no solo en su colaboración anual con Cáritas Diocesana de Canarias, sino también en diversas acciones solidarias a lo largo de los años. Desde campañas de igualdad de género hasta el apoyo a voluntarios que acompañan a niños en el Hospital Materno Infantil, la empresa demuestra un compromiso integral con su comunidad.

Comida donada por Grupo Sabina a Cáritas Diocesana de Canarias.

Comida donada por Grupo Sabina a Cáritas Diocesana de Canarias. / La Provincia

En el marco del evento de entrega de los casi 20,000 kilos de alimentos realizado por el Grupo Sabina, el director de Cáritas Diocesana de Canarias dedicó unas amables palabras a la empresa, destacando el papel esencial que desempeña el Grupo Sabina en la capacidad de respuesta a las necesidades más urgentes, atendiendo de manera continua entre 550 y 700 familias. Las ayudas destinadas exclusivamente a alimentos constituyen un pilar sólido en la estructura de asistencia de Cáritas, y esta colaboración se ha sostenido de manera sistemática a lo largo de los años.

La travesía solidaria del Grupo Sabina, que ha abarcado ya once años, se erige como un testimonio conmovedor de resiliencia y dedicación altruista. A lo largo de esta década, el grupo ha enfrentado diversas adversidades, desde la dura embestida de la crisis económica hasta la impactante sacudida de la pandemia global. No obstante, la determinación del Grupo Sabina continúa inquebrantable, enraizada en el firme propósito de persistir mientras la pobreza social prevalezca y existan familias que requieran asistencia.

La capacidad del Grupo Sabina para superar desafíos ha sido un componente crucial de su travesía solidaria. La crisis económica y la pandemia no han disuadido a la organización de su misión fundamental de brindar apoyo a quienes más lo necesitan. En lugar de ceder ante las adversidades, el grupo ha canalizado su energía hacia la búsqueda de soluciones innovadoras y la adaptación constante a las cambiantes circunstancias, reafirmando así su compromiso inquebrantable con la causa.

Un hito destacado de esta dedicación es la entrega anual de alimentos, que en el último año ha alcanzado la asombrosa cifra de 19,856 kilos. Este acto tangible no solo es un gesto significativo, sino que también simboliza el compromiso sostenido del Grupo Sabina. La magnitud de esta contribución subraya el impacto positivo que la organización está logrando, proporcionando no solo alivio inmediato, sino también sembrando las semillas para un cambio a largo plazo en la lucha contra la pobreza.

Esta colaboración no es simplemente una donación de alimentos; es un ejemplo inspirador de la unión de los canarios hacia la solidaridad. A lo largo de once años, la colaboración ha alcanzado casi 185,000 kilos de alimentos, marcando una trayectoria constante de apoyo a las familias canarias en situación de vulnerabilidad. Lalo Daswani, presidente y propietario del Grupo Sabina, destaca que estas acciones solidarias son una forma de devolver a la sociedad lo que esta tierra ha brindado a la empresa.

En resumidas cuentas, la travesía solidaria del Grupo Sabina, que abarca ya once años, sigue desafiando las adversidades. La determinación del Grupo Sabina persistirá mientras la pobreza social perdure y existan familias que necesiten ayuda. Esta colaboración no solo es puntual, sino que se sostiene de manera sistemática a lo largo de los años, convirtiéndola en un componente fundamental para el funcionamiento efectivo de Cáritas Diocesana de Canarias. La empresa demuestra un compromiso integral con su comunidad, desde campañas de igualdad de género hasta el apoyo a voluntarios que acompañan a niños en el Hospital Materno Infantil.

En un mundo donde las cifras a menudo dominan la narrativa, la colaboración entre el Grupo Sabina y Cáritas Diocesana de Canarias es un recordatorio elocuente de que, juntos, podemos marcar la diferencia. La solidaridad no es solo un acto aislado, sino una fuerza motriz que impulsa un cambio sostenible en la sociedad. En cada kilo de alimentos donados, en cada gesto de apoyo, se teje una red de esperanza que fortalece el tejido social de las Islas Canarias.

Este no es simplemente un acto filantrópico; es un testimonio vibrante de la capacidad de la comunidad y las empresas para colaborar en la construcción de un futuro más justo y equitativo para todos. En la intersección entre la prosperidad empresarial y la responsabilidad social, el Grupo Sabina y Cáritas Diocesana de Canarias nos muestran el poder transformador de la solidaridad, recordándonos que cada esfuerzo cuenta y que, juntos, podemos construir un camino hacia un mañana más brillante.