Las infecciones respiratorias se hacen notar en los colegios de Canarias

Un aula de 20 alumnos a la que solo acuden cuatro y docentes que solicitan bajas para dos o tres días. Como cada año con el aumento de las infecciones respiratorias agudas en la época invernal, escenas similares se repiten en los centros escolares de las Islas. Los datos de Salud Pública, que vigila semanalmente la evolución de la gripe o el coronavirus, entre otros, muestran que desde principios de noviembre, la incidencia no ha dejado de crecer, desde los 583,55 a los 1021,95 casos por 100.000 habitantes a inicios de diciembre. 

El informe muestra que en ese periodo, desde la semana 45 (del 6 al 12 de noviembre) hasta la 48 (del 27 de noviembre al 3 de diciembre), el mayor aumento de la incidencia se generó en el grupo etario de 5 a 14 años, que ha pasado de 918 a 1.862 casos por 100.000 habitantes. Si bien, respecto a la semana anterior, el incremento fue más pronunciado en la población de entre 45-64 años, con 207 más, hasta los 756 cuadros por 100.000 habitantes. La única franja de edad que muestra una dinámica descendente es la de 0 a 4 años, aunque presenta la mayor incidencia con 5.077 cuadros por 100.000 habitantes. 

Las infecciones respiratorias en Canarias crecen un 34% desde principios de octubre

Aunque aún no es representativo de la población en Canarias, hasta inicios de diciembre Salud Pública ha analizado 72 muestras procedentes a través de los médicos centinelas que participan en la prueba piloto para determinar los tipos de infecciones respiratorias. Así, se obtiene que el 19,44% han sido positivas para SARS-CoV-2; el 16,67% para Gripe -que en su mayoría corresponden a gripe A- y 11,11% para VRS. 

Cabe aclarar que los datos que ofrece Salud Pública semanalmente no muestran relación alguna con los centros escolares, sino en Atención Primaria y centros hospitalarios. Pero desde colectivos educativos se ha percibido un aumento significativo de las bajas de docentes o una ausencia notoria entre el alumnado durante esta época del año. 

El presidente del sindicato ANPA en Canarias, Pedro Crespo, indica que, aunque carece de datos exactos, sí "hay mucho profesorado afectado, quizá un poco más que otros años". En sentido, explica que no se trata de bajas de larga duración, "a lo sumo, tres o cuatro días sin poder asistir al centro", pero que tiene unas ligeras repercusiones en el funcionamiento del día a día. 

"La mayor dificultad es cuando coincide un alto porcentaje profesorado del mismo centro", añade Crespo. Ante esta situación, sobre todo en aquellos que son más pequeños, desde el sindicato mayoritario de representación del profesorado se recuerda que se ha propuesto a la Consejería de Educación flexibilizar la plantilla, "que está bastante ajustada con carácter general", apunta Crespo.

"Si es una baja larga no hay problema porque la Consejería activa los planes de sustituciones, pero son ausencias de pocos días. Si coincide que es un centro pequeño y hay cinco o seis docentes enfermos, la afección es mayor. El planteamiento es que haya más apoyo educativo para apoyo o desdoble. Por ejemplo, que en un aula haya dos profesores, que es docencia compartida y que en algunos centros ya está en funcionamiento. Si se tiene el profesorado extra durante todo el curso para atender todas las circunstancias, cuando llegan estos momentos ese recurso se puede utilizar. Pero como estamos muy ajustados, es complicado", detalla Crespo.

Aunque sin estar acotado a las infecciones respiratorias agudas, el Gobierno de Canarias mantiene el proyecto piloto de Enfermería Escolar iniciado en 2021, que introduce la figura de profesionales sanitarios en Atención Primaria en las aulas con el objetivo de atender las necesidades y problemas de salud del alumnado, actuar en la prevención de enfermedades y promover la salud de toda la comunidad educativa en concreto, en 62 centros este curso.

Al inicio de la legislatura, el Consejo Escolar de Canarias presentó un documento de 100 propuestas de mejora de la educación, entre las que proponía dotar de más recursos personales a los servicios de apoyo, como enfermería escolar, educadores sociales o psicólogos, "para adecuar la respuesta en los casos de atención a la diversidad". Aunque celebra el programa piloto, teme que su carácter de programa piloto no lleve aparejado su continuidad en el futuro.