"A nosotros nunca se nos hubiese pasado por la cabeza poner efectos de fuego en una fantasía, es muy peligroso". Estas fueron las palabras que Carolina Hernández ofreció ayer desde Hospitén, donde se encuentra su marido, Víctor Manuel Díaz, por las quemaduras que sufrió en el incidente que se produjo en la Gala de la Reina de Santa Cruz el pasado miércoles. Son los diseñadores de Saida Prieto, la candidata cuyo traje se prendió fuego debido a los efectos pirotécnicos que llevaba otra fantasía, la de Willy Jorge, y que está siendo atendida en la Unidad de Quemados de Sevilla por la gravedad de sus quemaduras.

Saida Prieto, de 25 años, continúa en estado grave, y precisa medidas de soporte vital, según un comunicado que emitió ayer el centro hospitalario, el único interlocutor oficial autorizado por la familia para dar noticias sobre su estado. Los padres de Saida, Juan Manuel Prieto y Dulce María Hernández, rogaron ayer que se respetara su intimidad.

La joven ingresó en el centro sevillano sobre las 19.00 horas del jueves. Saida padece quemaduras de segundo grado profundo y de tercer grado en el 42 % de la superficie corporal total. Mientras, la juez titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Santa Cruz de Tenerife, Julia Navarro, ha ordenado la investigación del caso a la policía judicial. Además, ayer el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife anunció que desde hoy se celebrarán todos los actos oficiales del Carnaval. La decisión contó con el sentir y el apoyo de los padres de la candidata, a quienes el alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, acompaña en Sevilla. Juan Manuel Prieto y Dulce María Hernández.

Los progenitores agradecieron las muestras de cariño de los chicharreros pero consideraron que a su hija le gustaría que la fiesta continúe. Aunque el estado de salud de la joven es el centro de toda la preocupación tinerfeña, también sus padres y el resto de familiares han recibido multitud de gestos de apoyo.

Por su lado, la diseñadora Carolina Hernández contó que Víctor Manuel Díaz tuvo que volver a ser ingresado en el hospital el jueves porque su situación había empeorado mientras se encontraba en casa. Y aunque tiene claro que "cuando todo esto pase" se tendrán que exigir responsabilidades y tomar decisiones complicadas porque lo que ha ocurrido "es muy grave", tanto a ella como a su compañero ahora solo les importa la salud de Saida. "Queremos que nuestra niña se ponga bien, que regrese pronto a la Isla y que podamos verla y abrazarla", manifestó.

Víctor y Carolina intentan borrar de su memoria la terrorífica experiencia que vivieron la noche de la Gala, pero aseguran que es imposible. "Cuando nos dimos cuenta de que el traje se estaba prendiendo fuego, Víctor y yo nos metimos a sacar a nuestra Saida, y lo volveríamos a hacer una y mil veces, pasara lo que nos pasase. Afortunadamente los bomberos actuaron de forma rápida", comentó Carolina.

La diseñadora aprovechó para agradecer todas las muestras de cariño y de ánimo que están recibiendo. Del único compañero que no han recibido una llamada es de Willy Jorge, cuyo traje provocó el fuego en el de Saida, según matizó la diseñadora.

Carolina Hernández cree que el Organismo Autónomo de Fiestas debería de cambiar las bases del concurso de elección de la Reina del Carnaval para prohibir de forma expresa el uso de cualquier tipo de fuegos en el desfile de las candidatas y cree que los diseñadores "deben ser más responsables con lo que hacen".

A estas declaraciones se sumaron ayer el resto de diseñadores con los que logró hablar La Opinión: Jonathan Suárez, Javier Santana, Jorge González, Sedomir Rodríguez, Dámaso Ramos, Daniel Pagés, Santi Castro, Expedita Hernández y Miguel Ángel Castilla. Precisamente fue este último el que menos pelos en la lengua tuvo al mostrar su indignación ante lo ocurrido, tachando al diseñador Willy Jorge de "irresponsable" por usar fuegos en su traje. "Él no es ningún técnico en pirotecnia. Cada uno debe ser responsable de sus actos y más cuando se está jugando con las vidas humanas. Por su orgullo y afán de destacar vamos a tener que pagar todos", dijo Castilla.

Algunos de los diseñadores ven tan responsable de lo ocurrido al Organismo Autónomo de Fiestas como al diseñador que puso fuegos en su traje. Es el caso por ejemplo de Jorge González y de Dámaso Ramos, quienes también creen que el Ayuntamiento tendría que haber inspeccionado la fantasía antes de que se subiera a la rampa del escenario, pues, según reconoció el propio concejal de Fiestas, Fernando Ballesteros, Willy Jorge presentó una solicitud de autorización para usar estos efectos, que no fue ni aceptada ni denegada por parte de la organización. Esto significa que el Organismo tenía conocimiento de lo que iba a hacer este diseñador, porque además se incluyó en el guión de la Gala. En las bases del concurso de elección de la Reina del Carnaval de Santa Cruz se establece: "se permite acompañamiento a la candidata de cuerpo de baile o actuación musical en vivo durante el desfile. Asimismo, se permite el uso de fuegos artificiales, fuegos fríos o cualquier otro elemento siempre que no se ponga en peligro la seguridad de la candidata y el público en general, previa comunicación y aprobación del disparo por el Organismo, con una semana de antelación".

Lo que ocurrió en este caso es que, según el Ayuntamiento, solo hubo una solicitud de autorización por parte del diseñador para la que se pidió más información, como el seguro correspondiente, y nunca se respondió. Y según el entorno de Willy Jorge, sí se contaba con la autorización de Fiestas y la organización sabía que se iban a utilizar fuegos. Por esta razón, y para que no haya ningún otro tipo de confusión, los diseñadores exigen que se prohíba el uso de efectos de "cualquier tipo" que puedan poner en peligro la seguridad de las candidatas y de las personas que las rodean. "Es una lástima que se haya esperado a que ocurra una desgracia para que se tomen medidas", declaró Daniel Pagés, que no entiende como se puede ocurrir combinar "telas con fuego".

Reunión

Jonathan Suárez recordó que incluso en alguna ocasión se celebró una reunión con el Organismo de Fiestas tras la tragedia del Perro Maldito en la que se habló de prohibir cualquier tipo de fuegos en el Carnaval. "Pero se ve que se olvidaron y las bases continuaron tal como están, porque sigue permitiéndose", añadió Pagés. De todas formas, los diseñadores insisten en que cada uno tiene que ser responsable de su traje y de lo que hace. "A mí también me da mucha pena Willy porque lo que ha pasado es muy grave y todo fue un accidente, pero utilizar fuego en las fantasías es algo demasiado arriesgado", dijo Sedomir Rodríguez.

Santi Castro, también presidente de la Asociación de Diseñadores del Carnaval, comentó que si se emplean efectos "diferentes o que tienen una especial complicación" se tiene que contar con la ayuda de profesionales en la materia. Para Santi Castro el fuego es demasiado peligroso y hay recursos sin necesidad de algo tan arriesgado.

Por otra parte, y en relación a que la Gala de la Reina se celebrase a pesar de lo ocurrido, la mayoría de los diseñadores creen que Juan Carlos Armas y su equipo tomaron la decisión acertada. "Si aquello se hubiese suspendido podría haberse producido una tragedia de las características que el Madrid Arena, por la alarma y el pánico que se hubiesen generado", dijo Dámaso Ramos.