La Guardia Civil, del puesto de San Bartolomé, en Lanzarote, arrestó a dos personas, identificadas como K. F. M. y B. A. M., residentes en la Isla, por ser los presuntos miembros de una banda especializada en realizar robos con fuerza en coches de alquiler. Los agentes esclarecieron un total de 26 delitos de robo con fuerza, cometidos desde el pasado mes de junio, al tiempo que han recuperado, tras el registro en una vivienda, gran parte de los objetos que fueron sustraídos de los turismos, valorados en unos 30.000 euros.

Los miembros del Instituto Armado realizaron un operativo especial, después de las diversas denuncias presentadas por las víctimas, que eran en su mayoría, turistas de nacionalidad extranjera, como señaló un comunicado de la Benemérita.

Como fruto de la investigación los agentes pudieron detener a los dos sospechosos cuando pretendían realizar un robo más con fuerza en un vehículo que se encontraba situado en el aparcamiento de un centro comercial situado en el municipio, como agregó dicha nota de la Guardia Civil.

Asimismo, el Cuerpo Nacional de Policía colaboró con los agentes al facilitar información respecto a varios de los delitos que supuestamente cometieron los dos detenidos en el municipio de Arrecife.

Los dos arrestados, que habían sido puestos a disposición judicial, junto a los objetos robados que fueron recuperados, ingresaron en prisión, como así lo dictó el titular del juzgado de guardia de Arrecife.

Playa Honda

Por otra parte, agentes del mismo puesto de San Bartolomé esclarecieron otro delito, exactamente el de daños que ocurrió el pasado día dos de septiembre en un centro docente de Playa Honda. Los daños fueron valorados en más de mil euros.

Los guardias civiles, tras las primeras pesquisas, identificaron el día 11 a cuatro personas, todos ellos menores de 14 años, por su relación con los desperfectos realizados. Aunque están exentos de responsabilidad penal por las edades que tienen en la actualidad, las actuaciones judiciales continúan para depurar las responsabilidades civiles. Las diligencias fueron remitidas a la Fiscalía de Arrecife.