La Policía Nacional detuvo en Gijón a un varón considerado como uno de los más activos y famosos expertos de España en subir películas y series pirata a internet y que con su actividad ilícita causó un perjuicio económico a la industria del cine de un millón de euros. Según la Dirección General del cuerpo, los servidores que alojaban los contenidos -un gran número y de gran calidad- hacían aportaciones económicas al detenido en función del número de descargas o visionados.