Los padres de un bebé de sólo un año de edad se llevaron en la mañana de ayer un susto tremendo después de que el pequeño sufriera un desvanecimiento en el interior de su vivienda en Mesa y López. Lo que en principio parecía una parada cardiaca, quedó en una obstrucción de las vías respiratorias por flema que, gracias a la dilación de los agentes de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria y los sanitarios del Servicio de Urgencias Canario (SUC), se consiguió liberar. El pequeño fue evacuado al Hospital Materno Infantil donde ingresó en buen estado.

El incidente ocurrió poco minutos antes de las ocho de la mañana cuando el progenitor, aún en pijama, salió a la plaza de España con el menor en brazos. Allí, dos policías de la Unidad de Tráfico que controlaban la circulación en la zona le atendieron al ser alertados de que el pequeño podría encontrarse en parada cardiorrespiratoria por un catarro, que había provocado acumulación de mocos en las vías respiratorias. Por ello, acudieron de inmediato hasta el cercano centro de salud de Alcaravaneras, situado en la calle Olof Palme, al comprobar que tenía una respiración muy débil. Sin embargo, según fuentes municipales, al llegar se toparon con que a esas horas aún no había ningún médico en el ambulatorio, por lo que dieron aviso de inmediato al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 para que movilizara una ambulancia medicalizada del SUC.

El facultativo, al llegar al centro sanitario, verificó que el bebé había tragado flema, que le impedía respirar con normalidad, por lo que procedió a liberar de mocos la fosas nasales. Asimismo, decidió trasladar al pequeño hasta el citado complejo hospitalario. Para ello, los agentes de Tráfico se organizaron para escoltar el vehículo de traslado de pacientes con la mayor rapidez posible. A la pareja de policías se unieron otros dos motoristas, que se encargaban de cortar el tráfico en las cruces para dar prioridad de la ambulancia, mientras otros dos policías avanzaban por delante para que el resto de conductores dieran paso. En cuestión de cuatro minutos el bebé ingresó en el hospital, indicaron las mismas fuentes.

El pequeño se encontraba en buen estado de salud una vez fue hospitalizado en el Materno Infantil después del sobresalto inicial que se llevaron tanto sus familiares como los agentes de la Unidad de Tráfico.