Una estampa habitual en las últimas semanas, pero no por ello menos molesta. Prosiguen los atascos a causa de las obras de asfaltado en la GC-1. Un día más, este miércoles por la noche el tráfico se ha ralentizado en la salida de la capital grancanaria, dificultando el regreso a casa de muchos trabajadores.

En esta ocasión, los trabajos se llevaban a cabo entre el Cruce de Melenara y el de Ikea viejo. Los coches debían bajar a Melenara y Salinetas para seguir, un carril estaba cerrado desde kilómetros antes del cruce, y otros dos sufrían retenciones.

Como consecuencia, los conductores y usuarios de los transportes públicos siguen teniendo que recurrir a la paciencia mientras se quedan atascados en la carretera.