El coronavirus no solivianta a las mafias que se dedican a organizar las pateras y los cayucos en Mauritania y Sáhara Occidental. El Estado de Alarma en el que se encuentra España no ha provocado una disminución de la llegada de estas infraembarcaciones como ha ocurrido en el resto de España. Al revés, se ha intensificado. Si durante los primeros 15 días apenas llegaron 41 personas por esta vía; a partir del 20 de marzo lo han hecho unas 428 personas en 14 embarcaciones.

Las tres últimas pateras se localizaron ayer con 93 migrantes. Las dos primeras lo hicieron de madrugada. Una de ellas fue localizada por el Servicio Integrado de Vigilancia Exterior de Salvamento Marítimo, que localizó una de ellas a 12 millas al sur de Pasito Blanco. Ocurrió sobre las tres de la madrugada y en el interior iban 31 personas, siete de ellas mujeres -una embarazada-, 4 niños y 1 bebé. Todos se encontraban en buen estado de salud y fueron llevados a Arguineguín, al igual que los 39 varones subsaharianos que fueron localizados sobre las tres de la tarde al sur de la Isla después de que salieran desde Nuadibú (Mauritania). Al muelle de Los Abrigos, en Tenerife, fueron trasladas otras 23 personas que fueron rescatadas de madrugada por Salvamento Marítimo.

En la península disminuye

Las estadísticas de Canarias difieren mucho de las registradas en Península y Baleares, donde las entradas irregulares a través de la vía marítima y terrestre cayeron un 58,4% durante la segunda quincena de marzo respecto a la quincena anterior, según los datos del Ministerio del Interior recogidos por Europa Press.

El pasado 14 de marzo el Gobierno decretó el Estado de Alarma por la crisis del coronavirus Covid-19. En este contexto, durante la segunda quincena de marzo se ha registrado la llegada irregular de 274 personas, de acuerdo a las cifras oficiales. Sin embargo, del 1 al 15 de marzo se contabilizaron 659 entradas de manera irregular en territorio español peninsular.