Los 38 migrantes que anoche fueron rescatados por una embarcación de Salvamento Marítimo a cinco millas al sur de Fuerteventura se convirtieron en los primeros que tendrán que pasar una cuarentena. El Gobierno de España emitió ayer una orden en la que obligaba a todas aquellas personas procedentes del extranjero a quedar confinados durante 15 días para así evitar un posible contagio que son portadores del coronavirus. Delegación del Gobierno y el Cabildo Insular buscaban a última hora del día un espacio donde puedan las próximas dos semanas.

La embarcación fue localizada sobre las nueve de la noche. Ya durante la tarde, un avión de Salvamento Marítimo había rastreado la costa que separa el Archipiélago con el continente africano durante aproximadamente tres horas después de recibir un aviso de la salida de una patera. No fue hasta ya la noche cuando se dio el aviso de que se entraba a unas cinco millas de Fuerteventura.

La Salvamar Mizar salió al encuentro y procedió a rescatar a las 38 personas (24 varones, 9 mujeres y 5 niños), todas ellas de origen subsahariano, que iban en la patera. Estos fueron trasladados a tierra para ser atendidos por los sanitarios del Servicio de Urgencias Canario (SUC) y de Cruz Roja. Algunos de ellos tuvieron que ser derivados al Hospital General con hipotermias.

Las autoridades se encontraron con el inconveniente de donde alojarlos después de la orden que entró en vigor ayer. El delegado y la subdelegada del Gobierno, junto a autoridades majoreras, buscaban al cierre de esta edición alguna instalación en la que mantenerlos confinados durante los próximos 15 días. La orden imposibilita que se mezclen con los migrantes que se encuentran en el albergue de Tefia y la Casa del Queso. Además, las instituciones tendrán que localizar otras instalaciones para la llegada de futuras pateras cuyos ocupantes tendrán que realizar una cuarentena sin mezclarse con más personas, según indicaron las fuentes consultadas.

Con esta patera son ya 27 embarcaciones y 933 personas las que han sido rescatadas o han llegado a las Islas desde el estado de alarma declarado el pasado 14 de marzo por la pandemia de la Covid-19.

Europol publicó este viernes un informó en el que avisó de que la inestabilidad económica y la falta de oportunidades en África, junto con la necesidad de mano de obra barata en la Unión Europea en plena crisis por la pandemia de coronavirus pueden desatar una nueva ola migratoria hacia los Estados comunitarios en medio plazo.