Este jueves se halló el cuerpo sin vida de una mujer que padecía el síndrome de Diógenes en el barrio de Schamann, en Las Palmas de Gran Canaria. Efectivos de la Policía Nacional y Bomberos de la capital grancanaria rescataron el cadáver de la mujer, de 51 años de edad, cuyo domicilio estaba repleto de desechos. Sus vecinos aseguran que nunca tuvieron la sospecha de que almacenara tanta basura en el interior de su domicilio.

Natalia es la vecina que llamó a la Policía Nacional advertida por su madre: “Mi madre me contó que sentía mal olor y veía muchas moscas en el edificio y, aunque en una primera ocasión no me llegó ese mal olor, sí que cuando fui tuve que llamar a la policía, porque el olor era insoportable. Les conté que se veían hasta moscas y que no se veía desde hacía días a la señora y me contestaron que mandarían un coche de policía”, cuenta la vecina que avisó a la Policía Nacional.

“Lo que pasó fue como una película de terror, porque los bomberos subieron por la ventana y no pudieron entrar. Se caía todo a la calle y hasta telas de araña vimos. Tuvieron que abrir la puerta y tirarla abajo y no pudieron sacar el cadáver en un primer momento, ya que no podían ni entrar. Por la tarde llegaron las unidades especiales de bomberos con trajes especiales, palas y sachos”, explicó en los micrófonos de COPE Canarias.

Explica que el comportamiento de la mujer fallecida no hacía sospechar el fatal desenlace. “Era una persona que no se dejaba ver mucho y casi los vecinos ni la veíamos, pero era chica normal, tranquila y que no daba problemas. Trabajaba en un juzgado en Guía, pero estaba de baja y nunca la vimos entrar con bolsas de basura. Nadie sospechó lo que hacía. Dicen que la muerte fue natural, porque hasta tenía le televisión encendida”, añade.

“Uno de los bomberos que estuvo en el interior de la casa nos dijo que en 20 años de profesión nunca había visto nada parecido”, sentenció.