El reflejo de su reloj le salvó la vida a William, un turista noruego de 78 años que desde ayer permanecía desaparecido y que fue encontrado por una pareja de la Guardia Civil de Puerto Rico en una zona de difícil acceso gracias al brillo del dispositivo. Un helicóptero lo trasladó al hospital con un fuerte golpe en la cabeza, de carácter grave, y con quemaduras por el cuerpo.
La denuncia la interpuso su hijo a las once de la noche del domingo. El septuagenario había salido a caminar por la zona de Puerto Rico y no había regresado a su casa. Ya durante la noche se activó un dispositivo de búsqueda en el que participaron la Guardia Civil y Protección Civil de Mogán. A ellos se les unió por la mañana los helicópteros del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES) del Gobierno de Canarias y del Instituto Armado, que llegó con componentes del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (Greim) con base en Tenerife.
Dos agentes del puesto de Puerto Rico lo encontraron en el barranco de La Verga en torno a las once y media de la mañana. El destello del reloj les llevó a acercarse hasta el punto donde se encontraba, una zona abrupta que dificultaba el acceso, y comprobaron que William estaba tirado, semiinconsciente y con varias quemaduras por el cuerpo. Así, la primera medida fue taparle del intenso sol que había a esas horas en la zona y dar aviso al resto de medios. La localización por parte de los agentes fue crucial, según indicaron fuentes de los equipos que actuaron en el servicio, puesto que el estado del hombre era grave.
La aeronave del GES procedió a evacuar a William hasta el Hospital Doctor Negrín de Las Palmas de Gran Canaria, donde ingresó con un traumatismo craneal de carácter grave, según informó el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112. Además, tenía diversas quemaduras, como señaló la Comandancia de Las Palmas.
El turista noruego sobrevivió a altas temperaturas en la zona, que durante la jornada de ayer superaron los 30 grados en la zona y no bajaron de los 25 durante la noche del domingo al lunes.
