La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Perfil

El concejal que entró soltero y ya es abuelo

Juan Martel es el decano de los concejales del ayuntamiento de Telde, con veinte años de experiencia en el salón de plenos

El concejal que entró soltero y ya es abuelo

Juan Francisco Martel Santana, Juan Martel o Juan, esta última la forma más generalizada de dirigirse a él, es, con 51 años [30 de mayo de 1964], doblemente abuelo. Primero, porque desde agosto se ha incorporado a su familia la pequeña Mía de las Nieves, nacida en plena celebración de las fiestas de su barrio, Lomo Magullo, y segundo, porque desde junio es el concejal más veterano, que no de edad, del Ayuntamiento de Telde, donde comenzó hace 20 años.

En estas dos décadas, siempre ha militado en el Centro Canario Nacionalista (CCN), aunque en las últimas elecciones locales se presentó como independiente en Ciudadanos de Centro Democrático (CCD) tras abandonar el CCN por discrepancias con el pacto con Unidos por Gran Canaria. Asegura que nunca se ha movido de los principios del centrismo cuando se le achaca que ha pasado por diversos partidos, hecho qu desmiente al afirmar que ha ido en coalición con Coalición Canaria y Nueva Canarias en sus listas, pero sin dejar el CCN.

De carácter conciliador, no exento de una buena dosis de retranca, Juan Martel se ha ganado a pulso ser considerado el socio perfecto para cualquier pacto de gobierno. Lo dice hasta la oposición. Él, mirando hacia atrás y sin cantar lo de "veinte años no son nada", argumenta divertido su ciclo vital: "entré soltero al Ayuntamiento y ya soy abuelo", en lo que parece, si no cambian las cosas, será su último mandato. "Yo no digo ya nada, porque en una entrevista en su periódico hice público que pensaba irme y luego me he tenido que tragar mis palabras".

Incombustible, superviviente o estratega, como se le quiera definir, Martel ocupará uno de los primeros puestos en el listado de políticos teldenses con más años en la historia de la corporación local.

Y en este nuevo mandato municipal, que se extenderá hasta el año 2019, estaba casi cantado que formaría parte de la nueva mayoría. No tuvo que pasar por las maratonianas reuniones mantenidas por los tres grandes partidos -PSOE, Más por Telde y Nueva Canarias- para ponerse de acuerdo después de unos tira y afloja que pusieron a prueba los nervios, las ambiciones y también las ganas de pactar de los actuales socios de gobierno. A él le llamó la alcaldesa, Carmen Hernández, y le pidió su colaboración. Martel, que había anunciado que estaba preparado para incorporarse a la siete de la mañana del lunes para volver a su trabajo en el Cabildo, aceptó el ofrecimiento.

Con dos despachos, en los que salta de uno a otro según las urgencias del momento, el edil centrista hace bueno la definición de epíteto [adjetivo innecesario, por ejemplo, blanca nieve] cuando asume sus concejalías. O más claro, la pregunta, Martel, ¿qué, otra vez concejal de Policía, Parque Móvil, Tráfico y Seguridad? Pues sí, acierto pleno, pero hay que añadir también una nueva, la de Festejos. De hecho solo ha estado en la oposición durante 2003-2007 y 2011-2014. "En la oposición se aprende y se corrigen errores, he aprendido mucho con personas de grato recuerdo como Paco Santiago, Ildefonso Jiménez, con quien choqué al principio pero luego desde que nos conocimos es la persona con la que más he aprendido, además de Paco Valido, con quien entré en política", alega.

Recuerda como si fuera ayer sus inicios en la política municipal: "yo la entrada en la política se de lo debo a Festejos, una concejalía que siempre me ha gustado y ahora que la dirijocuando está en su peor etapa por la crisis económica en el Ayuntamiento, pero haremos todo lo posible para que recupere su antiguo esplendor". Era un veinteañero cuando Francisco Valido, concejal de Festejos en el mandato 1987-1991, después de conocerle como miembro de la comisión de fiestas de Lomo Magullo, en las que Valido estrenaba su cargo, "nos pidió a varios compañeros y a mí si le podíamos ayudar a recuperar las fiestas de San Gregorio y sobre todo la feria de ganado. No conocía de nada a este hombre [Valido], pero lo hicimos de forma altruista porque nos gustaba y años después, en 1991 me llamó para que me incorporara al Centro Democrático y Social (CDS), aunque no fue con el Centro Canario Nacionalista (CCN), su partido de siempre cuando fue elegido concejal.

Pero su vocación centrista no nació ese día, viene desde el seno del hogar de los Martel. "Yo desde joven participaba en los movimientos sociales de Lomo Magullo, pero no tenía ni idea de cómo entrar en política. En mi familia, como ocurría con muchas hace años, aunque hoy en día afortunadamente ya no es así, la orientación política la marcaba el abuelo y el mío era una persona de centro a quien le gustaba Adolfo Suárez. Por eso, cuando tuve la oportunidad de votar por primera vez lo hice al CDS y años después terminé en ese partido porque me gustaba y además en mi familia no desagradaba la idea".

Sin embargo, el decano de los concejales teldenses -desde 1995 en el salón de plenos- es escéptico con los partidos, sobre todo cuando se habla de política local. "Los partidos deben existir porque son los instrumentos válidos para hacer política, pero yo por lo que he vivido estos años valoro más la cercanía a las personas, para arreglar un problema a un vecino no hace falta ser de izquierda, derecha o centro, sino hacer bien las cosas", un lema que coincide con lo preconizado por la mayoría gobernante como hoja de ruta de su gestión para el próximo cuatrienio .

En 1995 se produce su debut en el Ayuntamiento. Coalición Canaria, "una formación encabezada por Francisco Santiago y que agrupaba a varios partidos como ICAN, el CCN y otros, consiguió 15 concejales y la mayoría absoluta", apunta Juan Martel, a quien le asignaron lo que luego han sido casi siempre sus áreas de gestión: Seguridad, Protección Civil, Tráfico, pero sin Policía.

Evoca esos días de inexperiencia política como un reto y ahora, como el edil decano de la corporación y 20 años después, asume estas mismas áreas por petición de la alcaldesa, aunque está especialmente contento e ilusionado con la de Festejos y Seguridad. Aunque en horas bajas y "no para lucirse y contentar a todos", recuerda que su primer contacto con la política fue desde la organización de las fiestas de su barrio y respecto a Seguridad admite que "es muy dura, pero necesaria para el municipio". También ha llevado Parques y Jardines o Mercados y también Vías y Obras.

Pero lo suyo parece claro, su sino es ser el responsable político de la seguridad y el tráfico en Telde. Asegura que cuando se vaya lo hará "sin haber pisado a nadie y siendo un concejal que nunca ha perdido la perspectiva de la calle, del ciudadano de a pie".

Compartir el artículo

stats