Una veintena de asistentes debatieron esta tarde sobre la seguridad vial en Jinámar, en un acto celebrado en la antigua Gerencia. Las intervenciones para explicar las demandas de los vecinos se saldaron con un recorrido sobre lo realizado y donde la moción presentada por la concejala no adscrita Esther González se erigió como la iniciativa que se debe reivindicar al grupo de gobierno para buscar una solución, hasta el momento sin respuesta.

En la moción, aprobada en el último pleno ordinario, se exponía la actual situación de desidia institucional y el abandono del barrio, al tiempo que se apuntó a que esta propuesta no caiga en el olvido y se recuerde en cada pleno cuál es su situación en cada momento. La razón, que la mayoría de las mociones aprobadas por la corporación municipal, nunca se ejecutan.

Uno de los ponentes enfatizó que mientras a Jinámar le dicen que no hay dinero para pintar los pasos de peatones, en otros barrios como La Garita sí que pintan. La escasa asistencia, no obstante, hace difícil que se puedan articular medidas de presión si no hay compromiso por parte de los residentes, como apuntó una representante de un partido político. "Es el pueblo el que debe decidir qué hacer y los partidos convertirnos en palanca para impulsar sus reivindicaciones, no al revés", sentenció.