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Raúl: "Dos fallos no deben afectar a la titularidad de un portero"

Raúl: "Dos fallos no deben afectar a la titularidad de un portero"

El meta de la UD acata los pitos - "Me valen para crecer" - "Siempre que me toca, hay debate; llevo así siete años"

La rutina de respirar en el infierno. El guardameta Raúl Lizoain Cruz [51 duelos en la UD, doce en Primera] asume con naturalidad estar en el centro de la diana. El pasado domingo, tras recibir el 0-2, de Aspas, fue silbado por el Gran Canaria. La batalla más caótica acabó (3-3) ante el Celta, y el portero recibió de todo: puñales y aliento. En su cuarto partido de inicio en este curso 2016-17 (360 minutos, siete goles encajados), admite que erró en los dos primeros tantos del cuadro celeste de Eduardo Berizzo.

Ayer, en su vuelta a los entrenamientos en Barranco Seco, en el 'día I' tras la catarsis, completó la primera parte de la sesión con el grupo. Sonriente, alejado del ruido.

"¿Especial? Fue como cualquier día después de un partido importante. Vuelves a entrenar y reflexionas. Te centras en mejorar y en el próximo compromiso ante la SD Eibar [sábado, 19.45 horas, Bein LaLiga, Estadio de Gran Canaria].

En alusión a los pitos y al impacto de sus errores enfatiza que "hay días que ocurren cosas, al final es parte del juego de ser portero".

El tanto de falta de Wass -minuto 6- superó con facilidad una barrera de cartón y pilló al arquero isleño descubierto. Pero entró por su zona. En el 14', una mala salida del de Escaleritas, facilitó a Aspas el 0-2 de vaselina. Llegó el escándalo. Pitos y recriminaciones entre los aficionados. Los 'raulistas' y 'antiraulistas' se enzarzaron bajo la tormenta de pólvora del Celta.

"Esto puede pasar, intentas que no suceda. Trabajas duro para crecer y mejorar, desde la disciplina y la responsabilidad, pero ocurre. Tanto a mí, como a otro compañero, el error forma parte de esta profesión. Son gajes del oficio".

La Romareda y el 'playoff'

Con el 0-3, de nuevo Aspas (21'), se fundieron los plomos. En el segundo tiempo, Bigas, Viera (penalti) y Prince, lograron la igualada (3-3). A pesar del punto, el debate de la portería agotaba un nuevo capítulo. En la sala de prensa, Setién tuvo que acudir al rescate de la araña. Recriminó los pitos al '1' amarillo.

El carrusel de emociones tiene un encaje didáctico para el meta. Se puede aprender al filo del abismo. "No fue ni peor ni mejor que otras actuaciones. De todas, aprendo. Le pasa a todos los porteros, incluso al mejor. Entre todos, se logró empatar un partido que estaba perdido. Resalto la comunión con la grada, los aplausos. Me quedo con ese premio, no con los pitos".

El 17 de junio de 2015, Raúl Lizoain recibía tres goles del Real Zaragoza. Era la ida de la final del playoff de ascenso a Primera División (3-1). Aquella debacle le costó el puesto al isleño, ya que en la vuelta, el mágico 21-J, jugó Casto. La UD ganaba (2-0), y Araujo le brindaba el tanto definitivo en la banda. Ese abrazo fue una de las imágenes del histórico ascenso.

Superar aquel calvario, ser privado de una cita histórica, así como el torbellino de críticas, le hizo invencible. Un máster de psicología. "Lo bueno, es que el pasado domingo no sentí inseguridad. En otros momento sí, me hubiese derrumbado. Pero ya llevo muchos años aquí [es su séptima campaña en la UD], y no te afectan. Algunos te pitan; otros te aplauden. No le quiero dar importancia, no soy del agrado de un sector. Lo sé, quizás le guste a otros. Este deporte es así".

El rey de los debates

Raúl no se esconde. Tiene fuerzas y una tonelada de energía. "Estoy listo para jugar el sábado, si el entrenador lo cree pertinente. Una titularidad no debe depender de dos errores o una mala actuación. Eso le pasa a todos los porteros. En cada partido hay muchos fallos, en todas las demarcaciones, y eso no tiene por qué afectar a una titularidad. Pero decide el míster".

Solo hay debate cuando aparece Raúl Lizoain. Desde la 2011-12, cuando debutó de la mano de Juan Manuel Rodríguez, ha tenido que demostrar más que sus competidores. Primero, trabajó a la sombra de Mariano Barbosa, y desde la 2014-15, de Casto Espinosa. Y desde la pasada, con Javi Varas.

"Sinceramente me ocurre todos los años; siempre hay debate. Es la pelea que tengo siempre, con lo que tengo que convivir. Siempre que juego, cada semana que me toca, llegan los debates y las historias. Convivo con esos aspectos, pero ya no me afectan. En su día, sí. Ahora, pare lo que pare, siempre se habla de por qué tengo que jugar".

'Mea culpa' en dos goles

La araña pulsa 'play' y visualiza los tres tantos recibidos. Admite su responsabilidad en los dos primeros. "El 0-1 es un tiro que toca en un jugador del Celta, pero siempre en los goles se puede hacer algo más (...) En el 0-2, es una toma de decisión rápida; cuestión de milésimas. Pero no debo salir...".

Tras el incendio del pasado domingo, y la enorme carga crítica de la grada, Raúl Lizoain niega que haya dialogado con Setién. "El míster no ha hablado conmigo: ya llevo muchos años. Esta semana, decidirá quién debe defender la portería. La relación con Varas es perfecta. Siempre la he tenido con todos mis compañeros de portería. Pero no creo que por un simple partido, o dos lances, depende la titularidad".

El preparador cántabro, durante su periplo como máximo responsable del Lugo, ya practicó esta política de rotaciones. Raúl encadena cuatro, tras los seis de Javi Varas.

"No nos ha comunicado nada, a día de hoy, desconocemos si existe un proceso fijado de rotaciones por partidos. Ya ha reiterado en sala de prensa que rotará. Es lo que conocemos...Nos sirve de estímulo para trabajar duro en cada entrenamiento por una oportunidad".

Respaldado por el vestuario, el meta de Escaleritas subraya que en su puesto pasa de héroe a villano por un centímetro. "En otras posiciones, no se ven los errores. La gente de fútbol, lo sabe. Todos fallamos". En su retina, sigue presente el curso con Herrera. El más duro.

"Siempre había debate, me llegué a volver loco. Había comentarios, pero ya no me afecta. Fue un aprendizaje. Me 'enterraron' -dice en tono coloquial- y resucité. Lucho por el equipo de mi tierra. Soy feliz, no pararé de sacrificarme por mis colores y la afición". El testimonio de la araña. El renacido.

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