La lupa del alfil. Radiografía al estratega de los récords. Luz sobre el rostro de las mil variantes. El extremo zurdo de la UD Jerónimo Figueroa 'Momo', que el sábado cumple 35 años, valoró la contratación de Manolo Márquez, que se estrena el próximo 20 de agosto en un banquillo de la máxima categoría.
"Conozco poco de Márquez, pero los chicos del filial comentan y el año pasado estuvieron encantados con su trabajo. Lo más positivo es la manera que luce de gestionar el grupo (...) Lo hace con mucha armonía y bajo un clima de buen rollo entre los jugadores. Le gusta tener el balón, pero también quiere que sus equipos estén ordenados, le iré conociendo con el paso de los días", aseguró el talentoso atacante, que computa 218 duelos oficiales.
En su octava pretemporada de amarillo, rechaza establecer comparaciones con otros directores técnicos como Quique Setién, Paco Herrera, Lobera o Juan Manuel Rodríguez. "Cada uno tiene sus formas, dará continuidad al modelo de juego [en relación al poético y de toque del cántabro] y también ha dicho que se adaptará a los futbolistas. Las dos opciones son válidas (...) Llega con muchísima ilusión, tanto él como Valerón, Paquito?Y se les respeta".
La Copa de las piñas
A sus 117 duelos en Primera, confía en estirar su paso por el planeta de Messi. No piensa en el adiós. Tiene gasolina para estirar su reinado de caviar. "Estoy bastante cómodo con el nuevo cuerpo técnico. Siempre estoy con la misma ilusión aunque me cueste un poco más cada año. Hay que sufrir, coger cargas y llegar lo mejor posible. Me encuentro muy bien (...) Sigo apretando, si sigo aquí es porque soy válido y el club cree que puedo ayudar. Intentaré apoyar al equipo con mi experiencia", insiste el zurdo.
Elogia el nivel físico de Araujo. La gran sensación de este inicio. "Ha venido bastante bien. Me sorprende en el sentido de que está centrado, está fino (...) Los meses que estuvo en Atenas le ayudaron. Tiene unas grandes condiciones y espero que nos ayude mucho".
Cuestionado por el doble duelo ante el CD Tenerife en agosto -la Copa Mahou-, y por el accidentado final de la última edición en el Heliodoro, pide cabeza fría. "Un derbi es especial, nunca quieres perder contra el eterno rival. Tenemos que olvidar lo sucedido contra el Tenerife. Partidos con tensión siempre hay, pero tenemos que jugar con deportividad". Acaricia los 35, y luce el coraje de un vikingo.
