Mel sigue entre nosotros. Miguel Ángel Sánchez ‘Míchel’, técnico del Girona FC y que fue dirigido por José Mel Pérez en el Rayo, no detecta la huella de Xavi García Pimienta en Las Palmas. Como si no existiese. En la UD actual, la de ser protagonistas con el esférico, percibe la esencia ‘melista’. El estratega madrileño fue despedido el pasado 23 de enero tras caer en el Fernando Torres (3-2).
«Con Pepe también querían ser protagonistas con el esférico. Ya jugaban así, con una elevada cuota de posesión e incluso con más variantes. En Montilivi [segunda jornada de competición] se nos presentaron con una línea de cinco [con tres centrales]. Pimienta está más consolidado en la idea del 4-3-3 e impondrá su sello».
Sobra la presión, se la atribuye en bandeja de plata a la UD. «La presión mala es para el que no tiene margen de error», pero admitió que su equipo no se puede «descuidar», porque también piensa en acercarse a la Ponferradina, el Tenerife, el Valladolid, el Eibar y el Almería. Míchel también reiteró que su sueño es «entrenar con el Girona en Primera División».
Admite que quiere «dar más fortaleza al equipo» y que necesita que el cuadro catalán «sea muy fuerte defensivamente, sin ninguna grieta, que ataque bien para defender mejor y que defienda bien para atacar mejor». En este sentido, reconoció que su equipo combina «momentos de mucha lucidez» y de un juego «espectacular» en ataque con fases en las que «sufre» sin balón. «Hay que seguir empujando hacia el equilibrio necesario para ser candidato a ascender a Primera», afirmó el técnico rojiblanco. Sobre el duelo, enfatiza que «es un equipo de play-off» e insistió en que el objetivo es «ganar la posesión y el partido». «Se trata de un partido de promoción de ascenso», aseveró.
En este sentido, explica que Las Palmas es «el equipo con más posesión; el que da más pases por minuto y el que brinda menos pases largos». «Domina mucho el balón y se mueve muy bien entre líneas. Hay que cerrar los espacios interiores». Y, para aspirar a ganar, avanzó que sus jugadores deberán «estar muy juntos y ser agresivos». Antes de la rueda de prensa, Míchel quiso enviar «un mensaje de solidaridad y fuerza en nombre del club al pueblo de Ucrania».
