En la política de rotaciones que aplicó Xavi García Pimienta en el doble compromiso pasado ante el Lugo y la Ponferradina hubo dos excepciones: Eric Curbelo y Enzo Loiodice, dos de los cinco que fueron titulares en ambos en encuentros, pero en cuyo caso sumaron prácticamente todos los minutos. El satauteño, de hecho, los jugó todos; el francés, por su parte, se retiró en el 88’ de El Toralín para dar entrada a Vitolo. De alguna manera, el técnico les considera casi insustituibles en esta UD.
Sobre todo al central, que es el futbolista de campo que más ha jugado –Valles, el portero, acumula todos los minutos de juego, es decir, 990, los que corresponden a 11 jornadas–. El canterano suma 928 y ha estado siempre en el campo salvo la primera hora del choque de La Rosaleda, donde fue suplente en la segunda fecha. Jamás volvió al banquillo.
El técnico barcelonés le considera fundamental por su velocidad y capacidad de anticipación en un equipo que defiende muy arriba y que necesita de jugadores rápidos para correr hacia la portería propia. Además, el de Santa Brígida presenta uno de los mejores registros físicos de la plantilla; nunca muestra síntomas de cansancio. Por todo ello repitió tanto en el Anxo Carro como en el Toralín, con buenas actuaciones en ambos encuentros.
El centrocampista, de su lado, es el único futbolistas del plantel que ha sido titular en todos los partidos disputados hasta el momento. Además de ser igualmente un portento físico, se trata de un jugador cuyo perfil no está repetido en la plantilla actual –Kirian era el otro, pero una enfermedad le dejó sin ficha el pasado verano–. Es un interior que no sólo participa en la creación de juego desde atrás, sino que también llega al área contraria en busca del gol.
Loiodice acumula un total de 851 minutos, sólo superado por Sergi Cardona (904), Curbelo y Valles. Si bien salió de inicio siempre, sólo completó cuatro choque por el desgaste que siempre realiza. Es otro titán de esta UD.
