Munir: 24 titularidades y una deuda pendiente con el gol

Munir El Haddadi, un protagonismo elevado sin pólvora. El delantero de origen marroquí acumula 1.891 minutos en 25 jornadas y ha sido titular en 24 ocasiones. Con dos goles –anotados ante el Almería el 28 de octubre y ante el Barça, el 4 de enero en el Estadio de Gran Canaria–, ante el Atlético de Madrid fue retirado en el minuto 81 para dar entrada a Pejiño. Fue el quinto y último cambio de García Pimienta. A pesar de la necesidad extrema de cambiar el guion del partido, el estratega barcelonés mantuvo al expistolero de Getafe, Barça o Sevilla contra viento y marea. Marc Cardona (469 minutos) cuenta con tres dianas y ha sido titular únicamente en cinco ocasiones. Moleiro contabiliza cinco suplencias y dos tantos en el zurrón.

El rey de los minutos en la caseta pío pío es Álvaro Valles con 2.250 minutos, seguido por el capitán Kirian Rodríguez (2.046’), así como por los defensas Mika Mármol (2.030’) y Sergi Cardona (1.988’). En quinta lugar figura el marroquí, que en el Cívitas Metropolitano solo gozó de un disparo desde la frontal. ¿Hay caso Munir? ¿A qué se debe el empeño del estratega barcelonés en mantener al ‘17’ en el once inicial? Solo lo ha sentado en una ocasión y fue en el Estadio de Gran Canaria ante el RCD Mallorca en la disputa fecha liguera, el pasado 12 de agosto.

La suplencia en esa primera fecha provocó que los amarillos saliesen en el frente ofensivo con Jonathan Viera, Marc Cardona y Benito Ramírez. Munir saltó al césped a falta de 26 minutos para el final. En la siguiente jornada, ya ante el Valencia en Mestalla, el atacante no se bajaría del once.

El pichichi de la UD es Kirian Rodríguez con cinco tantos. Luego figura Marc Cardona (3) y ahí aparece Munir El Haddadi (2) en la posición del bronce. También con dos están los jugadores Javi Muñoz, Pejiño, Alberto Moleiro.Con uno Álex Suárez, Cristian Herrera, Sory Kaba, Benito Ramírez, Saúl Coco, Julián Araujo y Juanma Herzog. 25 goles a favor, un reparto democrático y un equipo sin un nueve goleador. Marc Cardona es el pichichi de los delanteros de la UD con sus tantos. Luego aparece Munir (2), Sory Kaba (1) y Cristian Herrera (1). Ninguno de estos cuatro últimos ejecutores pueden considerarse titular en el planeta García Pimienta.

Es la UD de los trece goleadores y del crédito ilimitado para Munir. Marc Cardona vio portería ante el Valencia y sigue en el banquillo. La última titularidad del leridano se remonta al 9 de diciembre con la visita al Mendizorroza. Más de dos meses. Además, el preparador catalán ha sacrificado en las dos últimas jornadas a Moleiro, para dar entrada al incisivo Marvin Park. Los indiscutibles del estratega de la UD son Valles, Mika, Coco, Sergi Cardona, Suárez, Kirian, Javi Muñoz, Máximo Perrone, Munir y Sandro Ramírez. El pistolero marroquí, que prometió trece tantos en su presentación, completa un trabajo defensivo impecable. Sin balón, ayuda, corre, presiona y vigila a su par. Ese rol ha convencido a Pimienta que mantiene al exjugador del Barça, y al que entrenó en los filiales azulgranas.

Diez tantos con el Alavés

Munir suma 44 días sin marcar en Liga. En la categoría de los disparos, el líder en la UD es Kirian Rodríguez con doce. Luego le siguen Sandro Ramírez (10), Javi Muñoz (8), Pejiño (8) y Munir El Haddadi con siete. El internacional con Marruecos acumula 228 partidos en la máxima categoría y 42 goles.

El techo de Munir fueron los diez tantos conseguidos con el Alavés (17-18). El pasado diciembre, con la visita de la UD al estadio de Mendizorroza, la afición vitoriana aplaudió al atacante marroquí, que se quedó en tres tantos la pasada edición liguera con el Getafe. El ‘17’ malogró un penalti ante el Rayo. Dos tantos en el zurrón y la promesa de trece en el horizonte. Pimienta, que jugó un papel clave en su fichaje, no sienta a Munir. Pase lo que pase, es indiscutible. Marc asumió en sala de prensa una situación que genera debates. «A nadie le gusta ser suplente, pero todos aportamos».El domingo llega Osasuna. El atacante con urticaria al banquillo vuelve a estar bajo los focos.

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