La ciencia lo desvela: ¿Cada cuánto debes cambiar y lavar las sábanas?

La cama es uno de los lugares dónde más tiempo pasamos en nuestra vida (si dormimos lo que marca la ciencia deberíamos pasar un tercio de nuestra vida) por lo que es importante mantenerla en un buen estado de higiene, ya que después puede pasarnos factura a la salud. Una de las dudas más repetidas dentro de las tareas domésticas es cada cuánto hay que lavar y cambiar las sábanas, ya que en ellas suelen acumularse bacterias y microorganismos.

Según la ciencia, aquellos que no lavan de forma frecuente sus sábanas, con la acumulación de polvo que eso puede suponer, tienen un mayor riesgo de acabar desarrollando asma o alergias a los ácaros, por lo que hay que prestar mucha atención a la higiéne de nuestra cama.

La ciencia responde a la pregunta

Un estudio realizado por la universidad de Cambridge ha revelado el tiempo que deberíamos cambiar las sábanas para que las bacterias no se acumulen. El tiempo máximo que debería pasar es de dos semanas, aunque según la época del año esta puede variar, ya que ahora en verano solemos sudar más y deberíamos hacerlo cada semana.

Además, también debemos tener en cuenta otros factores a la hora de lavar las sábanas y es que cuando enfermamos las bacterias pueden quedar pegadas, por lo que también es importante cambiarlas, más si dormimos en pareja. Un detalle importante es programar su lavado a temperatura caliente, sobre unos 60 grados.

Una de las recomendaciones de los expertos es ducharse por la noche, ya que de esta forma, la cama no recoge toda la suciedad y sudor acumulado durante el día. Eso sí, también hay que secarse bien el cabello, ya que la humedad es una mala compañera para las sábanas y la superficie mojada acumula más microorganismo y hongos.

Por otra parte, una encuesta realizada por el medio británico BBC recoge que los hombres solteros suelen cambiar las sábanas de su casa en periodos de cuatro meses o más y el 12% reconoce hacerlo cuando se acuerda. Unos datos muy significativos si los comparamos con los de las mujeres, las cuales el 62% afirma lavarlas cada dos semanas. Las parejas y matrimonios suelen hacerlo cada tres semanas.