Un billón de euros. La canciller alemana adelantó la cifra mágica para el Fondo Europeo de Estabilización Financiera, con la que se intentará aplacar definitivamente a los mercados y cerrar la crisis de la deuda soberana. El parlamento alemán debe dar su visto bueno horas antes de la cumbre de líderes de la Eurozona de mañana miércoles. Alemania descarta cualquier aumento de su participación en este fondo, al que debe aportar 210.000 millones de euros.