Anders Breivik ha se ha dirigido al público con el brazo extendido y el puño cerrado. Era su saludo provocativo nada más llegar al tribunal que hoy inicia el juicio contra él. El asesino de Utoya ha negado al tribunal y se ha delcarado no culpable de los atentados en los que murieron 77 personas. "Fue, ha dicho, en defensa propia". Breivik ha dado la mano a los psiquiatras que lo han tratado. A partir de hoy se inician 10 semanas de juicio para determinar si el asesino de Utoya es ingresado en un psiquiátrico o cumple condena en una cárcel.