Y mientras se llega a un acuerdo en Europa, la frontera entre Hungría y Serbia ha sido cerrada a cal y canto. Un portavoz del gobierno húngaro explicaba esta medianoche que lo hacen para impedir el paso de inmigrantes ilegales. Además, cinco horas antes, el Ejército húngaro, adelantándose al plazo anunciado cerraba con un vagón de tren lleno de concertinas los únicos cuatro metros que quedaban abiertos de su frontera con Serbia, justo el ancho de las vías del tren.