Solo unas horas después de su citación como investigada, la exprincesa alemana Corinna Larsen salía al paso de las nuevas imputaciones que sobre ella vierte el juez Manuel García Castellón. Corinna niega haber contratado al excomisario Villarejo para espiar la supuesta deslealtad de una de sus empleadas, oferta que el expolicía le ofreció insistentemente, según apunta el juez en el auto que cita a Villarejo y a Corinna Larsen como investigados. Pero en su comunicado Corinna no dedicó una sola línea a lo que en España importa y preocupa: los ya no tan desconocidos ingresos multimillonarios del rey emérito en el extranjero. Anoche, el presidente del Gobierno dejaba clara la postura del Ejecutivo: "todo lo que haga la Casa Real en esa dirección de ejemplaridad y transparencia, el Gobierno de España y estoy convencido, el conjunto de la sociedad española, lo aplaudirá". Sánchez, una vez más, desvincula las investigaciones sobre el rey emérito de Felipe VI y de la institución de la Monarquía: "defendemos la monarquía parlamentaria, no van a encontrar ni al PSOE ni a mi persona como presidente del Gobierno en ninguna intencionalidad de socavar ni la confianza en las instituciones ni desde luego debilitar el pacto constitucional". Mensaje de Pedro Sánchez en un momento en el que su socio de Gobierno, Podemos, insiste en cuestionar la utilidad de la Monarquía.