Para un recién nacido no hay nada como el cuidado materno. De ello depende, en muchos casos, un sano crecimiento. Así lo están comprobando en el centro de osos panda de Chengdú, en China, donde se ocupan de dos nuevas crías. Dos mellizos con los que han conseguido que su madre no les rechace y se ocupe totalmente de ellos.