La familia de Sara Gómez ha denunciado al cirujano por homicidio. Aguardan en el juzgado a que este aparezca y les aclare cómo pudo morir por una liposucción. Los informes califican la operación de negligente. Sara sufrió 27 perforaciones que afectaron a órganos vitales. El médico tiene el título de cirujano y un máster en estética, pero los profesionales lo tachan de intrusismo en una especialidad para la que éticamente no estaría capacitado. El juzgado valora ya la suspensión cautelar del cirujano y la retirada del pasaporte ante un posible intento de fuga.