"La tesis del erotismo y la sauna es mentira y el único agredido [por la Policía] fui yo". El presidente del Cabildo de La Gomera y senador del PSOE por la isla, Casimiro Curbelo, detenido en la madrugada del jueves en Madrid, negó ayer que insultara ni agrediera a ningún policía y subrayó que él ha sido el "único agredido, maltratado y humillado". Según Curbelo, el suceso se desencadenó tras el intento de presentar una denuncia por parte de él y su hijo contra un local de copas. El atestado policial habla, sin embargo, de un sitio de alterne e incluso el dueño del local reconoció ayer a LA PROVINCIA los hechos aunque salvó del altercado a Curbelo y culpó al hijo del senador (ver página 18).

Al intento de denunciar, la Policía respondió, según Curbelo, despectivamente y de forma agresiva y acabó deteniendo a su hijo y posteriormente al propio senador, que fue arrojado al suelo boca abajo y esposado. Curbelo asegura que los policías rompieron su móvil y sus gafas.

En una rueda de prensa celebrada ayer en el Cabildo de La Gomera, Curbelo aseguró tajante: "La tesis del erotismo y las saunas" que se han utilizado son mentiras. El senador socialista aseguró que prepara una denuncia contra la Policía y que llegará hasta el final.

Señaló que el origen de los hechos se encuentra en una denuncia que su hijo, de 26 años, quiso interponer ante la Policía Nacional por el trato que habían recibido en un establecimiento de ocio de la calle Orense, informa Efe.

Curbelo dejó claro en su rueda de prensa que no dimitirá, como le ha solicitado el PP y respondió: "ese placer y satisfacción solo se lo darán las urnas". Afirmó además que su partido en Canarias le ha arropado. Según su relato, tras cenar con su hijo y un amigo de éste, acudieron a esta calle a tomar unas copas para celebrar que los dos jóvenes habían finalizado sus carreras de Arquitectura e Ingeniería de Telecomunicaciones.

En uno de estos locales, dijo, su hijo Adays tuvo una discusión con un camarero y fue conminado a abandonar el establecimiento y, a instancias del joven, decidieron acudir a la Policía para denunciar el incidente, hecho que tuvo lugar sobre las 3:00 de la madrugada.

Fue en una comisaría de Policía situada en la zona, donde se producen, según Curbelo, "los lamentables acontecimientos" que comienzan cuando Adays le dice al agente que estaba en la puerta que quiere denunciar unos hechos y, de acuerdo con el relato del presidente del Cabildo gomero, el policía ignora al joven y le dice que se vaya. Adays, agregó Curbelo, reiteró al agente su deseo de denunciar lo que le había ocurrido en el establecimiento de copas y de nuevo el policía le dice que se marche y, ante la insistencia del joven, el policía le empuja.

Curbelo añadió que fue, ante un segundo empujón del policía, cuando el hijo puso su brazo para protegerse, lo que fue entendido como un intento de agresión y el joven fue detenido y esposado. El senador señaló que fue entonces cuando recriminó al policía su actuación y le dijo que se trataba de una detención ilegal y desproporcionada y que estaban tratando a su hijo "como si fuera un terrorista".

Según Curbelo, fue empujado por la Policía y, ante la insistencia de sus críticas, cuatro policías se abalanzaron contra él, lo tumbaron boca abajo y le rompieron las gafas y el teléfono móvil y le esposaron. Dijo que advirtió a los policías que se trataba de una detención ilegal ya que para detener a un senador tiene que ser sorprendido en flagrante delito, "cosa que no era el caso".

Casimiro Curbelo reconoció que había tensión, pero aseguró que en ningún momento por su parte se produjeron insultos ni ninguna agresión hacia ningún policía y señaló que en ese momento "alguien" hizo una llamada y se consumaron las pretensiones de los policías de detenerle. Tras su detención, llamó a su abogado y al Senado para informar de los hechos.

Prosiguió que posteriormente fueron trasladados a la comisaría de Tetuán, donde permanecieron unas cuatro horas, según la agencia Efe, que refiere el suceso como ocurrido a las 3.00 de la madrugada. Según Curbelo, siempre según esta agencia, estuvo detenido cuatro horas y a las 14.00 fue puesto en libertad.

Curbelo dijo que la actuación policial fue desproporcionada y reprochó que hayan utilizado el argumento de los insultos y la agresión para justificar una intervención "poco ajustada a derecho". Anunció que su abogado está preparando las actuaciones judiciales que procedan y lamentó que se hayan tergiversado los hechos para hacer "daño a un político y al PSOE". En su opinión, el PP y sus medios afines han hecho de este "incidente lamentable que le puede ocurrir a cualquiera" un problema nacional y subrayó que ese partido ha actuado de forma vil y descarada.