La huelga en la sanidad pública canaria convocada para el jueves se mantiene, al fracasar hoy el último intento negociador, protagonizado por representantes de los sindicatos CESM, CCOO, UGT, SATSE y SEPCA y la directora del Servicio Canario de la Salud, Juana María Reyes.

Los sindicatos reclamaban garantías de que en 2012 se mantendrían los 25.000 puestos de trabajo en la sanidad pública y a partir de ahí estaban dispuestos a negociar sin cortapisas otros ahorros, pero el Servicio Canario de la Salud (SCS) sólo ha garantizado el mantenimiento de la "plantilla orgánica", es decir, los que tienen plaza fija o de interinidad.

Según los sindicatos, el recorte de 50 millones de euros en gastos de personal y el aumento del horario de trabajo semanal en dos horas y media se traducirá en el despido de 2.000 trabajadores eventuales y sustitutos, lo cual hará imposible mantener en condiciones aceptables el servicio público sanitario.

Juana María Reyes, directora del SCS, indicó que pese al recorte en los gastos de personal para 2012, no habrá "reducción de plantilla", aunque admitió que se harán menos contratos eventuales.

La directora garantizó el mantenimiento de la plantilla orgánica, no del personal eventual para refuerzos y sustituciones.

En el caso de los programas de tarde con jornadas extraordinarias se pretende que los realicen las plantillas con el incremento de horario de dos horas y media, por lo que, aunque no se va a despedir a personal, sí se van a dejar de realizar algunos contratos eventuales.

"Propusimos una negociación para posibles mejoras de la eficiencia para ajustar el presupuesto a la rigurosidad presupuestaria y de gasto público que se nos exige", pero no ha sido posible, se lamentó la directora del Servicio Canario de la Salud.

Los sindicatos planteaban como premisa para desconvocar la huelga una modificación en los presupuestos que no se puede hacer sino en el Parlamento a través de enmiendas, dijo Reyes, y aseguró que ella se comprometió "a ir hablando de posibilidades de acuerdo que sean viables" en torno a un posible cambio en el articulado.

Juana María Reyes dijo que la Consejería pretende con su presupuesto de 2012, que globalmente aumenta un 2,6 por ciento pese al recorte en gastos de personal, mantener los servicios y la plantilla y garantizar la sostenibilidad del sistema.

La directora del Servicio Canario de la Salud indicó que los servicios mínimos para el próximo jueves cubrirán urgencias, quirófanos y oncología médica, y en el caso de que se pierdan consultas se tratará de "repescar y reubicar a los pacientes".

Por parte del comité de huelga, José Tapia Alonso reiteró que los sindicatos están dispuestos a hablar de todo sin restricciones siempre que se garantice previamente el mantenimiento de la plantilla.

La plantilla ya de por sí está "disminuida y deteriorada" y reducirla más "abre la puerta al desmantelamiento de la sanidad pública y al desastre".

"Con 2.000 menos en una plantilla de 25.000 de la calidad nos olvidamos, daremos una prestación sanitaria básica pero la sanidad pública entra en barrena", advirtió.

Por eso hizo un llamamiento a la participación en las manifestaciones convocadas para el jueves a las seis de la tarde en defensa de la sanidad pública, que partirán desde el Parque San Telmo en Las Palmas de Gran Canaria y desde la Plaza Militar en Santa Cruz de Tenerife.