Madrid ha sido la última comunidad autónoma en sumarse a la tesis de Gobierno de Canarias. Igual que el presidente Paulino Rivero, el jefe del ejecutivo madrileño, Ignacio González, tacha el modelo con el que se sufraga la sanidad, la educación y las políticas sociales de "injusto". González, que ha enviado en esos términos una carta al ministro de Economía y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, se une así a las demandas de comunidades que se siente "maltratadas" y a cuya cabeza se ha colocado Rivero.
Este auspició durante el mes de agosto un frente autonómico con el que se pretendió presionar a Madrid. Mantuvo conversaciones con los representantes de Murcia (PP), Valencia (PP) y Castilla-La Mancha (PP). Todos igual de afectados por el desequilibrio del sistema, pero ninguno dio el paso adelante más allá de alguna declaración pública de descontento. Sólo Andalucía (PSOE) respondió a la llamada. José Antonio Griñán y Rivero mantuvieron una reunión el pasado 17 de septiembre en Sevilla, sobre la mesa: la necesidad de reformar el modelo. El Ejecutivo regional asegura que con el actual, modificado en 2009 con el voto en contra del PP, Canarias pierde 800 millones cada año. Lo cierto es que el sistema que Ignacio González califica de "absurdo", y que desde su punto de vista fue "retorcido" por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero para beneficiar a las cuentas de Cataluña y Andalucía, supone que las Islas reciban cada año 386 euros menos por habitante que la media; 354 en el caso de Murcia, 229 en el de Valencia, 188 para los andaluces y 102 en el caso de los madrileños.
Rivero y Griñán forzaron el 2 de octubre pasado, en la Conferencia de Presidentes, que Mariano Rajoy se comprometiera a estudiar las posibles disfunciones del modelo y a poner en marcha la comisión, vinculada al Consejo de Política Fiscal y Financiera, para elaborar una alternativa antes de que acabe la legislatura.
La negativa del PP a esta posibilidad siempre había sido férrea. Sin embargo, el mandatario de Madrid, según dio a conocer ayer El País, acaba de abrir una brecha. Algo por lo que el Ejecutivo canario no tardó ayer en congratularse de manera pública.
El portavoz del Ejecutivo, Martín Marrero, hizo público un comunicado expresando la satisfacción del Gobierno "por el hecho de que una Comunidad Autónoma tan relevante como Madrid y dirigida además por el Partido Popular se sume a las tesis que ha venido defendiendo Canarias en los últimos años en relación con el sistema de financiación autonómica".
Marrero recuerda en la nota las continuas críticas que el Gobierno de Canarias ha venido realizando sobre un "sistema injusto, que ha dañado muy gravemente los intereses no sólo del Archipiélago, sino de otras comunidades autónomas como Valencia, Murcia o Castilla La Mancha".
"Es muy llamativo que sea ahora la Comunidad de Madrid la que se pronuncie de manera tan clara y contundente contra los actuales criterios de reparto, calificándolos de incoherentes y absurdos", afirma.
Marrero apunta que si Canarias hubiera dispuesto de los 800 millones que recibe de menos "no habría sido necesario acudir hoy a ningún tipo de línea crediticia", señala con relación al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), al que ha solicitado 756 millones.
