Un nuevo frente se ha abierto en la crisis interna que vive la formación de Pablo Iglesias en Gran Canaria. Bases Podemos, la corriente crítica que encabeza Adolfo Padrón, se unió ayer al cruce de reproches entre la cúpula y sus consejeros en el Cabildo de la isla para exigir la dimisión de la secretaria general, Meri Pita, y el secretario insular, Alejandro Pérez, pero también que los cargos electos aclaren ante el partido de forma inmediata las denuncias de nepotismo que se dieron a conocer este fin de semana.

Pita ha acusado al vicepresidente de la corporación insular, Juan Manuel Brito, de propiciar la contratación de su pareja, Noemí Parra, como directora general de Igualdad y exige la inmediata retirada de esa propuesta. De no atenerse a las órdenes de la dirección del partido será llevado ante la Comisión de Garantías y expuesto a su expulsión.

La dirección de Podemos sostiene que ni en el caso de Parra ni en otros puestos para los que se ha abierto concurso se ha informado al partido sobre las necesidades que han motivado tales contrataciones o el número que se requiere o los perfiles profesionales definidos.

Brito tacha de falaz a su jefa y pone en cuestión la capacidad ética de la Comisión.

Esta situación, a juicio de Bases Podemos, define el "despropósito" que vive el partido en las Islas y especialmente en Gran Canaria. "No existe", subraya en un comunicado, "coordinación efectiva entre los diferentes órganos en sus niveles territoriales, hasta el punto que algunos Consejos Ciudadanos manifiestan sentirse "ninguneados"; se obstaculiza el funcionamiento de los Círculos; nuestra representación en las instituciones funciona a modo de reinos sin un proyecto político centrado en Canarias".

Desde su punto de vista la actuación de la cúpula del partido respecto a las acusaciones de nepotismo "obedece más a una huida hacia adelante que a una decisión basada en la autocrítica, las transparencia y la voluntad de reconducción de sus propios errores. La dirección de Podemos en Canarias", subraya, "lejos de asumir su papel como gestores, intenta escurrir el bulto y desviar toda la atención hacia una parte del partido, poniendo en entredicho con ello a toda la organización".

Pita y Padrón, señala Bases Podemos, han demostrado ser incapaces de poner en marcha "un proyecto político reconocible y coherente con los principios fundaciones" del partido sino que han hecho gala, dice, de una "continua improvisación en la toma decisiones".

Fruto de ello, subraya el comunicado, es que no existan, como sí ocurre en otros territorios del Estado, mecanismos que posibiliten la rendición de cuentas y "control democrático de nuestros órganos y cargos electos".

Recuerda, además, que la Comisión de Garantías con la que se amenaza a Brito está cuestionada por su partidismo en favor de la corriente dominante y sus miembros son objeto de un proceso judicial por supuesta falsedad documental.