El Parlamento de Canarias aprobó ayer la propuesta del Cabildo de La Palma de modificar la ordenación turística en dicha isla y en las de La Gomera y El Hierro con el rechazo de Podemos y de Nueva Canarias, formación esta última que calificó la norma de "sobredosis" de ley del suelo.

Todos los grupos parlamentarios, excepto los citados, han apoyaron el dictamen propuesto para modificar los artículos 4 y 8 de la Ley de 2002 sobre medidas de ordenación territorial de la actividad turística en las islas de El Hierro, La Gomera y La Palma.

El portavoz de Nueva Canarias, Román Rodríguez, defendió un voto particular presentado por su grupo al texto -que fue rechazado- por considerar que CC y PSC han introducido enmiendas durante la tramitación del dictamen que cambian sustancialmente el contenido hasta convertirlo "en una cosa distinta a la que planteaba el Cabildo de La Palma".

Entre otros aspectos criticó Rodríguez que se eliminan los límites de crecimiento y de capacidad de carga en dichas islas y se reducen los espacios "hasta lo absurdo", y además "le inquieta" el que "ni siquiera la discutidísima ley del suelo ha ido tan lejos", pues con la nueva ordenación cabe cualquier tipo de instalación turística en suelos de protección ambiental o agraria. Habrá "una ristra de hoteles y de campos de golf -hasta 33 actuaciones previstas- con la declaración de interés turístico singular, y entre ellas seis suspendidas por el Tribunal Supremo", reprochó Rodríguez".

La diputada del grupo Podemos Asunción Delgado advirtió que la nueva norma significará " un suicidio colectivo" para los habitantes de dichas islas por la desaparición de sus valores, atractivos y costumbres.

Por el contrario el diputado de ASG, y presidente del Cabildo de dicha isla, Casimiro Curbelo, dijo que a partir de ahora estos territorios tendrán más posibilidades para crear empleo y riqueza".