El último informe de la Audiencia de Cuentas de Canarias sobre la fiscalización de los gastos por productos farmacéuticos evidencia las dudas de este órgano sobre la eficacia en el control de esta partida por parte del Servicio Canario de Salud, en un momento en el que se vuelve a disparar el coste de las recetas médicas. En el mes de enero Canarias fue la tercera comunidad que experimentó un mayor crecimiento de este gasto -un 9%- tras Castilla-La Mancha y Aragón. Este dato sigue la estela de 2016, año en que las Islas estuvieron entre los cinco autonomías donde más aumentó la factura de las medicinas, con un 4,6% de media de incremento con respecto a 2015.
Una de las principales lagunas detectadas por la Audiencia es la ausencia de procesos normalizados de trabajo para los funcionarios y personal que prestan servicios en la Dirección General de Programas Asistenciales, en el que figuren con detalle las funciones de cada uno, así como los controles y pruebas que deban realizar sobre el proceso de facturación mensual de gastos farmacéuticos. Por ello el órgano fiscalizador de la Comunidad Autónoma recomienda la elaboración de un manual de procedimientos en el que se definan las labores, procedimientos, controles internos y competencias del personal, con la finalidad de maximizar la eficacia en la gestión.
El informe corresponde al ejercicio 2013, por lo que hay procesos que se han ido mejorando en los tres últimos años, entre ellos la implantación de la receta electrónica, ya que Canarias figura entre las primeras comunidades donde prácticamente todas las recetas que expiden los médicos se realizan a través del formato electrónico, lo que supone también una mejora en el control y en la comunicación entre Sanidad y las oficinas de farmacia. La inmensa mayoría de las recetas se prescriben desde los centros de salud, por ello el órgano fiscalizador reclama que mejore la comunicación entre los facultativos y la Inspección de Servicios para aclarar los casos de dudas en los visados que precisan algunos medicamentos.
Tampoco ve claro la Audiencia la coordinación entre Sanidad y los gestores de la aplicación informática Farmacanarias, por lo que recomienda que en el proceso de facturación del gasto cuente con un sistema de gestión de incidencias detallado. El sistema Farmacanarias realiza la gestión integral y análisis de la prestación farmacéutica con la elaboración de tablas y controles de las facturas.
Las consideraciones del órgano fiscalizador se refieren a un ejercicio en el que el gasto farmacéutico se redujo notablemente tras las medidas adoptadas por el Gobierno central tras la llegada del PP al poder. Entre estas acciones figuró el copago para los pensionistas, la salida de muchos medicamentos de la subvención pública y la implantación de los genéricos.
Sin embargo, esta tendencia a la baja del gasto farmacéutico se rompió el pasado año y esta partida no ha hecho sino incrementarse mes por mes hasta llegar a enero de este año, en el que las cifras se han disparado. Una de las causas ha sido el tratamiento para los enfermos de hepatitis C, uno de los motivos del desvío presupuestario en el Servicio Canario de Salud que provocó un enfrentamiento interno en el Gobierno canario entre Hacienda y Sanidad cuando estaba el pacto entre CC y PSOE.
Canarias consigna en los presupuestos 450 millones de euros para pagar las recetas médicas, una cantidad que en los últimos ejercicios ha cubierto con cierta suficiencia la factura en medicamentos. Sin embargo, el inicio de año, con una subida tan acentuada en todas las comunidades autónomas, ha puesto en alerta a Sanidad y al Gobierno central porque el insuficiencia de esta cuantiosa partida puede poner en un aprieto de nuevo los objetivos de contención del déficit público de las administraciones.
